Márcame (Minsung)

Capitulo 15

_Nuestra pequeña semilla 
De calabaza....✨️

_Un Mes después_

Nos paramos frente a aquella puerta azul cielo, las piernas me temblaban y no podía evitar pensar en lo asombrado que estaría el ginecólogo Obstetra al ver entrar a su consultorio a un hombre embarazado ya que desde que los híbridos se extinguieron los embarazos masculinos también se extinguieron, este era un nuevo siglo por lo tanto eran una nueva generación a la cual no se le había informado de la existencia de los híbridos.

Minho me tomó de la mano y la apretó con sutileza transmitiendome seguridad y valor, coloco su mano izquierda detrás de mi cuello y me acerco más a él depositando un cálido beso en mi frente.

—Todo estará bien cariño— me susurro, inhale profundo llenando mis pulmones con aire y luego soltarlo.

—Se que estará bien por que tú estas a mi lado— le devolví el beso pero en sus labios, tirando de estos hasta sentir su sabor metálico de la sangre.

—Aush, no eres carnívoro Sung—  Solte una carcajada.

—¿Quién lo dice? Soy un lobo vampiro Honnie, mi alimentación aún no está definida, así que si quiero puedo comerte aquí y ahora— Minho me lazo una mirada coqueta y se me  abalanzó encima dejándome caer en el pequeño sofá que estaba justo detrás de mí.

—Señores pueden pasar— la voz de una enfermera nos obligó a separarnos de inmediato.

—Continuaremos con esto en casa—  Minho me guiño un ojo y yo solo sonreí avergonzado con  mis mejillas teniñas de rojo carmesí.

—extrañaba ver el rojo de tus mejillas—  Minho dijo en un susurro.

—Basta Min, el doctor nos está esperando— La enfermera que aún estaba de pié afuera solo nos miraba  sonriendo con dulzura, nos  abrió la puerta y entramos  a aquel consultorio  donde nos recibió un joven doctor de cabello castaño y a lo lejos se le notaba que iba mucho al gimnasio.

—Buen día jóvenes—  El doctor se acomodo los lentes —En que puedo ayudarles, porque creo que se equivocaron de doctor, las citas para exámenes de ITS, están al final
del pasillo— resople enojado.

—¿Acaso no sabe quiénes somos?—

—¿Asi es como tratas a tú rey? mandándolo a hacerse una prueba de ITS— Pregunté enojado, Pero es por culpa de la hormonas, aquel joven doctor soltó una carcajada.

—Conozco al rey Hyunjin y claramente no eres tú— Respondió el "amable doctor".

—Oh Hyunjin es el esposo de mi hijo, mucho gusto soy Han Jisung— sonreí e hice que el cielo tronara para que le fuera más fácil creer, aunque me encantaba ver la reacción de las personas,  aquel doctor palidecio y cayó sentado de golpe en su silla, le sonreí  mostrandole mis hermosos colmillos y Minho se contenía la risa, coloco su mano sobre mi  hombro.

—Amor, deja de asustarlo— tocó mi espalda.

—Disculpe doctor es por el cambio de hormonas— Le lancé una mirada fría por quitarme la diversión.

— Estamos aquí por que mi precioso esposo quiere un ultrasonido, vamos a ser padres de nuestro segundo bebé— Minho dijo emocionado, el doctor aún con temblor de piernas se puso de pie y me indicó donde acostarme, levantó mi camisa holgada que tenía puesta y me  colocó un líquido viscoso y frío el cual me provocó escalofríos, pasó un aparatito sobre mi vientre y en una pantalla apareció la imagen de nuestro pequeño bebé el cual era  del tamaño de una semilla de calabaza.

—¿Ese es mi bebé?—  los ojos se me llenaron de lágrimas por lo emocionado que estaba.

—Nuestra calabacita— bromeo Minho.

El doctor dijo que el bebé estaba completamente sano y quince minutos despues ambos salimos  del consultorio con una enorme sonrisa en nuestros labios.

Tiempo atrás habíamos  planeado adoptar un bebé pero para los vampiros era complicado ya que con el tiempo el bebé crecería y tendríamos que verlo envejecer o tomar la decisión de morderlo, algo con lo que Minho y yo no estábamos de acuerdo

Estar embarazado es lindo, saber que hay una pequeña personita creciendo dentro de ti cada día, se siente emocionante sentir sus pequeñas patadas en mi vientre pero también hay algo que odio y son las malditas náuseas, los mareos y los antojos, a veces se me antojan cosas que a cualquiera le parecería un asco, como por ejemplo un helado de vainilla con sangre, ¿Sabes lo asqueroso que es? O un batido de sangre con banana y no me estoy quejando solo les estoy contando, por que para quejarme tengo a Minho.

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