Capítulo 30

121 23 1
                                    

Meses después..

—No importa cuanto tiempo 
Te prepares para algo, al final
Por la emoción terminas con la
Mente en blanco...
✨️

—¡Minhoo!— eran exactamente las tres Am cuando el gritó desesperado de Jisung provocó que cayera de trasero de la cama al piso.

—¿Que, que, que pasa?— pregunté en un tartamudeo viendo como Jisung respira agitado y toma mi mano y la aprieta con fuerza, "con mucha Fuerza" tanto que siento que romperá los huesos de mis dedos.

—Jae— Jisung Respira profundamente y al verlo yo hago lo mismo, —¡Ya viene Jae!— Grita y yo me vuelvo un estúpido total, mi mente se queda en blanco, no se que hacer, me había preparado para este día pero todo se fue a la mierda en cuestión de segundos.

—¡Minhoo!— vuelve a gritar pero está vez suelta un grito más de dolor.

—Ya voy, aguanta amor— corro rápido hasta el armario y saco la maleta que tengo preparada, la tomó y luego cargo en mis brazos a Jisung, corro tan rápido que me sorprendo de mi mismo, por que cuando me doy cuenta ya estamos en la entrada del hospital, recuerdo que habíamos planeado llegar en la camioneta que había comprado y así parecer personas normales pero se me olvido completamente, me siento como papá primerizo.

Dejé a Sung en una camilla y él se niega a soltar mi mano y yo no estoy dispuesto a dejarlo solo.

—El quirofano cinco, ya esta listo para hacer la cesaría— escucho decir a una enfermera, Jisung se queja del dolor y yo me siento un inútil por no poder ayudarlo, solo corro junto de la camilla mientras acarició su cabello, su rostro está sudado y mis piernas tiemblan, no recuerdo que haya sido así cuando Felix nació.

—Señor, Señor—  escucho una voz a lo lejos.

—Señor— repite sacándome de mis pensamientos.

—¿Sí?— Respondo luego de un tiempo y me doy cuenta que ya estamos en la entrada del quirofano.

—Debe desinfectarse y colocarse la ropa sanitaria para evitar cualquier contaminación— No me quiero separar de Sung y él tampoco de mí pero aún así asiento.

—Vuelvo en seguida cariño— Le digo en un susurro y dejo un corto beso en su frente, él suelta mí mano y yo me dirijo a la sala de desinfectacion, luego de unos minutos entro a la sala de operación vestido completamente de azul, bata, guantes, mascarilla, zapatos y un gorrito que me hace ver gracioso, Jisung ya está preparado le han puesto anestesia y ahora la mitad de su cuerpo está dormido, tomó su mano nuevamente mientras en me sonríe tiernamente.

—Tardaste mucho— me reclama con un puchero en sus labios

—Perdón amor— me disculpo.

Hay una cortina separando la mitad de su cuerpo, supongo que es para que no veamos como abren su hermoso estómago.

—Bisturí— escucho decir al doctor y luego de eso un fuerte olor a sangre llega a mis fosas nasales, casí me hace perder el control, pero Jisung aprieta mi mano y, luego siento un olor a vino reemplazar el olor metálico de la sangre  y me hace volver a mis sentidos.

—Succión—

Luego vários minutos o no se si fueron horas por que se sintió eterno, escuche el llanto de mi bebé, de nuestro pequeño Jae, bese la mano de Jisung quien está con una enorme sonrisa en su rostro, veo como la enfermera limpia al pequeño antes de envolverlo en una colcha y entregarmelo, es tan pequeño y tan frágil que tengo miedo de lastimarlo, lo veo bostezar y estirar sus pequeñas manitas.

—Mira amor, es tan precioso— Se lo acerco a Jisung y lo coloco en sus brazos y por dios, quiero pintar este momento e inmortalizarlo y guardarlo para siempre.

—Bienvenido Jae—  Jisung le susurra, besando la frente del pequeño y yo siento que muero de la ternura que ambos emanan, tomó de vuelta al pequeño en mis brazos justo cuando Jisung cierra los ojos y el pánico inunda mi ser, el ritmo cardíaco empieza a bajar un poco y por un momento olvido que él es inmortal.

—¿Que pasa doctor? ¿Por que Sung cerró los ojos?—

—Hey tranquilo, solo es la anestesia haciendo su efecto, despertara después de unas horas— 

Me siento tranquilo al escuchar esas palabras, la enfermera toma a Jae y se lo lleva a la sala donde están todos los bebés pero antes le coloca una pulsera con su nombre para no confundirlo con otro bebé.

En la sala de espera me encuentro con toda mi familia quienes me atacan con preguntas.

—¿Como esta el bebé? ¿Como está papá? ¿A donde llevaron al bebé?— Etc. Son unos paranoicos.

—Ambos están bien, Jisung esta dormido y Jae esta con los demás bebés— Les doy una respuesta rápida.

Márcame (Minsung)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora