ESPERA... ¿¡QUÉ!?

7

Finalmente las clases terminaron por ese día, Jisung y Seungmin parecían estar emocionados por la cita de Felix con Hyunjin.

Changbin por otro lado parecía un poco preocupado, nadie conocía mejor a la familia de Hyunjin como lo hacía Bin, sabía que por llegar tarde perdería varias de sus clases en casa y por lo mismo se llevaría la regañada de su vida.

-Hey Felix ¿puedo hablar con Hyunjin antes de que lo robes?- preguntó Bin, Felix solo asintió dejandolos solos en el salón para irse a despedir de Ji y Seung.

Changbing se sentó en un escritorio vacío, viendo directamente a Hyunjin y suspiro.

-Por favor- rogó Hyunjin - por favor, no me lo digas, ya sé.

Changbin no supo cómo arruinarle la ilusión a su mejor amigo, es raro, normalmente Hyunjin nunca desafiaría las reglas de su estricta familia en ningún momento. Esto es completamente nuevo...

-Mira -dijo Bin -Sé que apesta, solo quiero saber que tú entiendes lo que estás haciendo.

Hyunjin asintió, pero Bin no sentía que eso fuera suficiente -Bien -dijo levantandose -Te quiero Hyun y porque te quiero pasare por tu casa avisando que te quedaste un rato más porque el profesor te lo pidió.

A Hyunjin se le iluminaron los ojos de mera esperanza, la familia Seo era intima amiga de la familia Hwang, si bien los Seo no son tan estrictos ni apegados a lo que las normas de omegas y alfas suelen ser, Hyunjin no esperaba que su amigo mintiera por él.

-¡Eres el mejor! -Exclamó Hyunjin con emoción. -Te besaría aquí mismo si no estuvieras tan feo.

Ambos carcajearon tomando sus cosas para finalmente salir del salón.

Al salir se encontraron con Felix sentado en el piso, jugando algún tonto juego en su teléfono, esperando por Hyunjin. Bin asintió como despedida para ambos y comenzó a caminar solo por el pasillo.
Las clases habían terminado hace 10 minutos y Hyunjin no quería perder más tiempo.

-Vamos -Le sugirio a Felix. -En serio quiero un helado de chocolate.
Felix rio y tomó su mano, haciendo que ambos se sonrojaran.

-Vamos entonces -Susurró.

...

Llegaron a una heladería cerca del parque central y ordenaron un helado de chocolate para Hyunjin y de fresa para Felix.

Tomaron asiento en las bancas que estaban fuera del local, solo viendo pasar a la gente caminar, las aves del lugar cantaban como si fuera solo para ellos.

Hyunjin comía su helado tan concentrado y Felix no pudo evitar reír al ver una mancha de chocolate en su mejilla, la quitó dulcemente, aprovechando para sobar desde su mejilla hacia su barbilla.

Felix y Hyunjin se sonrojaron y Lix no supo de dónde vino esa valentía.
Estaban en silencio pero no fue incómodo, era muy relajante, para Hyunjin en especial, por primera vez en mucho tiempo sintió paz.

-¿Cómo está tu helado? -Preguntó Lix

-Está rico. Me encanta el chocolate, es la primera vez en mucho tiempo que puedo saborearlo.

-¿Qué? -dijo Felix confundido -¿Por qué?

Hyunjin suspiró, no es que siempre quisiera comentar sobre su familia disfuncional, pero siempre había algo que por una razón ridícula, él tenía prohibido.

-Mmm, bueno, mi familia es un poco obsesiva con eso de las dietas y ejercicio. Parece que entrenarme para ser Alfa es todo mi sentido en la vida. No suelo comer cosas dulces, tú sabes, golosinas, helados, postres, etc.

Felix asintió apenado. -Gracias por decirme -respondió. -¿Quieres hablar más sobre eso?

Hyunjin negó con la cabeza. -Todo está bien.

-Si te hace sentir mejor -dijo Felix. -Yo también tengo padres muy estrictos con eso, por eso me mude con mi abuela, ella es dulce y atenta conmigo. Ellos estaban obsesionados en hacerme encajar en su sueño perfecto de omega.

Hyunjin cambió el tema, estaba fuera de casa despues de mucho tiempo. No necesitaba deprimirse más.
Pasaron una linda tarde, ambos hablaron de su vida, de su familia, de la escuela y lo chistosa que era la profesora Chuu haciendo explotar los experimentos en química.

...

Hyunjin volvió a casa luego de una hora y media, sus manos temblando y su frente sudando. Su padre estaba esperando en la sala con una expresión severa.

-¿Te metiste en problemas? -Pregunto el señor Hwang.

-No.

-¿Por qué el hijo de los Seo pasó por aquí diciendo que te quedaste tiempo extra con el profesor?

-Porque él quería felicitarme, padre. Mis notas son de las mejores en su curso, charlo conmigo sobre las técnicas de estudio que utilizo, el tiempo se fue volando, lo siento. -la mentira salió sola y perfecta.

El señor Hwang levantó una ceja y a regañadientes dijo -Bien, deberías llamar tú la próxima vez y no mandar de mensajero al Joven Changbin.

Hyunjin asintió. -Ve a tú habitación y cámbiate para hacer algunos ejercicios. Ya perdiste mucho tiempo.

Hyunjin asintió y fue a su habitación a cambiarse, para finalmente terminar con su día.