Teacher's Pet [KookV]

VI

En la sala todos estaban atentos al cumpleañero que abría los regalos después del pastel, sus hermanos lo ayudaban con eso. Sung-hwan y Taehyung se habían unido a los demás chicos y estuvieron juntos hasta que el castaño se alejó pues quería un poco de hielo; el calor de las tardes de verano se sentía bastante sobre todo con tanta gente reunida pero las hieleras estaban vacías, el mayor de los Wang que se dio cuenta, le indicó que fuera a la cocina donde estaba su yerno, que él podría darle más hielos, a lo que el niño asintió y tomó el recipiente para caminar hasta el lugar. Cuando llegó a la puerta y notó que Jungkook no se daba cuenta de quién entraba y quién no, se aseguró de que todos los presentes estuvieran lo suficientemente entretenidos con In-Yeop y entró sin hacer ruido.

Cuando estuvo lo suficientemente cerca se abrazó a él pasando una de sus manos por el costado del mayor hasta su abdomen con sutileza y alzándose en puntas para alcanzar su hombro y poder hablar algo cerca de su oreja. -¿No hace demasiado calor para usar manga larga, profesor?

Ni siquiera tuvo que voltear para saber quién lo estaba tocando, reconocía esas manos en cualquier parte de su cuerpo, cerró los ojos a su tacto y sonrió con calidez. -Ahora me siento muy acalorado. -le dijo con un guiño de ojos. Notó el recipiente que el chico llevaba y lo tomó para servirle los hielos y no levantar sospechas si pasaban mucho tiempo en la cocina. -No podemos estar mucho tiempo aquí. -Jungkook tomó el rostro de Tae y le dio un beso tierno en los labios. - Te escribiré más noche. -Prometió con una sonrisa coqueta.

El castaño sonrió por ese beso y asintió con la cabeza antes de tomar el recipiente. -Gracias.- dijo refiriéndose a los hielos y caminó para regresar a la sala, justo en la puerta se encontró a Hana y su sonrisa se ensanchó ligeramente. Lo cierto es que, aunque no tenía nada en contra de la rubia, Taehyung no podía evitar pensar en que podía ser mejor para Jungkook, quizá sólo era un capricho de su cerebro adolescente o quizá lo que sintió al verlo con ella lo hacía pensar así. Había pasado mucho tiempo sintiéndose atraído por él, aunque claro lo disfrazaba con comentarios y apodos que hacían reír a sus compañeros, ahora que sentía que podía tenerlo era un sueño.

El resto de la tarde se la pasó con sus amigos entre pláticas y juegos en los que ocasionalmente Hana se autoinvitaba y jalaba a su esposo, cosa que parecía molestarle mucho a In-Yeop.

Cuando la noche cayó, algunos de los invitados empezaban a retirarse, entre ellos Taehyung y Hobi que se despidieron temprano para poder descansar lo suficiente.

Jungkook y Hana por su parte, se quedaron hasta el final para ayudar al abuelo a limpiar y recoger todo, la rubia estaba feliz de haber pasado el día con su familia y su marido estaba feliz por ella o eso aparentaba, en realidad Jungkook estaba feliz por haber podido ver a Tae, no tenía idea de que era tan amigo de In-Yeop y eso le daba una pequeña ventaja, pues significaba que mientras más conviviera con su cuñadito, más podría verlo.

-In-Yeop no ha abierto el regalo que le compramos. -dijo Hana con una sonrisa. - Tráelo, cariño. -pidió a Jungkook, el regalo estaba en el auto del chico por lo que salió de la casa para abrir la cajuela de su carro y sacar la consola que estaba envuelta en un papel negro con un moño dorado. Aprovechó que estaba lejos de su esposa para tomar su teléfono y abrir su correo, las ventajas de ser maestro es que tenía acceso a cierta información personal así que escribió un mensaje a Taehyung, no sabía si el chico vería el correo o no y realmente esperaba que nadie más lo hiciera.

jeonjungkook > kimtaehyung

🐰: Qué hermoso te veías hoy :)

Jungkook guardó su teléfono para entrar de nuevo a la casa de los Wang con el regalo entre las manos, In-Yeop abrió los ojos con sorpresa pues se veía grande, se apresuró a rasgar la envoltura y una sonrisa enorme se dibujó en su rostro, era la consola que tanto quería y los juegos que le gustaban.