Sunoo está enamorado de su esposo Sunghoon, llevan una feliz vida de casados o eso creía él hasta que llegó alguien tocando a su puerta buscando a su esposo.. "Tengo un hijo tuyo".
- Ficción ≠ Realidad
-Contenido 🔞
-Mpreg
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SUNGHOON POV
Eran las seis con treinta de la mañana y ya estaba en la oficina aunque el horario de trabajo no comenzaba hasta las 7:30, últimamente llegaba mucho más temprano y salía lo más tarde que pudiera, mientras menos tiempo podía pasar en casa mejor para mi.
Me dolía llegar a casa sin nadie que me recibiera además de mis empleados, así que solo lo tomaba como un lugar para dormir, a veces hasta dormía en la sala cuando no tenía el valor de subir a la habitación vacía.
Mi nuevo pasatiempo era ver cómo los empleados de la compañía llegaban uno por uno al trabajo, ahora hasta conocía a la mujer mayor que hacía la limpieza de mi oficina.
Había pasado media mañana, cumplí con varias reuniones que tenía programadas para el día de hoy, y me dediqué a terminar el papeleo que tenía pendiente en mi oficina con mi dosis de cafeína diaria que se estaba volviendo una adicción.
—¡Sunghoon! —escuche del otro lado de la puerta mientras tocaban.
—Adelante.
La puerta se abrió y vi a mi amigo Jay entrar por esta.
—¿Cómo estás amigo? —me pregunto Jay tratando de sonar animado.
—Bien, solo estoy terminando con un papeleo —respondí desganado.
—Amigo...traje algo que...no te gustara, perdóname.
Me dijo nervioso mientras ponía una carpeta sobre mi escritorio, pude ver su cara afligida así que inmediatamente tomé la carpeta en mis manos para ver el contenido de ella.
—Jay ¿Qué es esto? —dije algo molesto.
—Lo que es amigo, ahí lo dice claramente.
—Si estoy leyendo pero ¿por qué lo traes tú?.
—Sunoo habló conmigo y me lo pidió.
—¿Y decidiste que era buena idea hacerlo tu? Precisamente cuando se supone que eres mi mejor amigo.
—Lo sé y lo siento.
—Joder Jay, te conte como mierdas me sentía con la situación y vienes y me das una apuñalada en la espalda.
—Sabes que lo siento, y no quería hacerlo, pero sabes que si otra persona hubiera tomado el caso ya estuviera en primera plana, soy la única persona de confianza que tomaría todo discretamente.
—¿Y que se supone que haga ahora? No puedo aceptar esto.
—No tienes que hacerlo.
—¿No me vas a tratar de convencer?.
—Debería pero no puedo hacerlo porque eres mi amigo también, mi trabajo entre ustedes solo se limitará a la parte legal y se lo dije a Sunoo también.
