Capitulo 2: Juego Del Destino

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Abrió sus ojos con cuidado y visualizo al médico de la familia tomándole la presión, Se encontraba en su habitacion bajo la mirada de su madre y el duque Panich. Recordó que su madre queria decirle algo cuando se desmayo. No quería imaginarse  que era lo estaba pensando, Nunca lo iba a poder soportar. Se mantuvo en silencio mientras el medico terminaba de tomarle la presión.

—Su alteza tiene la presión baja, pero su desmayo no se debe a eso, lo he estado tratando durante años y puedo decir que se debe a que ha estado bajo mucho presión y estrés.- comunicó el doctor, mirando a la reina que estaba preocupada — solo necesita descansar por unos días, para que recupere las fuerzas y sobre todo, alimentarse como se debe.

La reina miro a su hijo alarmada yendo hacia el con preocupación.

—No tienes de que preocuparte su majestad - enfatizó chawarin con la voz un poco débil, no se sentía bien, pero no lo iba a demostrar —Solo necesito descansar y alimentarme bien.

—Voy traerte el almuerzo yo misma y no me voy a ir de la habitación hasta que te comas hasta la última migaja del plato —puntualizó mirando a su hijo con una advertencia —Doctor por favor acompañe al estudio. —Duque Panich ¿podría quedarse por unos momentos con el príncipe?

El duque asintió ante la petición de la reina y quedaron solos en la gran habitación del príncipe, el silencio reino en el lugar y chawarin se incorporó sobre la cama con un poco de dificultad. Se sentía fatigado y un poco mareado. Miro al duque que miraba fijamente cada movimiento que estaba haciendo y aprovecho que su madre no estaba para provocarlo.

—Podría ayudarme a ir al baño —pidió con voz inocente, tratando de levantarse de la cama con dificultad.

El duque fue hasta la cama y lo ayudo a levantarse con sumo cuidado. Chawarin no pudo evitar recostarse un poco sobre su pecho, inhalando el aroma de su perfume. Fingió que sus piernas no le respondía para caminar. Pidiéndole al duque que lo llevará en brazos. Pruk lo miro tratando de mantener la calma porque sabía que el príncipe solo lo estaba provocando. Lo llevo al baño como pidió y lo puso en el piso frente al inodoro.

—Esperare afuera —dijo con intención de irse, pero chawarin lo detuvo por el brazo.

—Mis piernas están débiles, ¿podrías sostenerme mientras hago mi necesidad duque Panich?

Pruk miro su rostro con una fingida súplica y tuvo que reprimir las ganas de salir del baño y dejarlo solo allí. Pero era su alteza real y el futuro rey de Eslovia. No podía dejar que sufriera ningún tipo de lesión en su cuerpo.

Desvío su mirada hacia un lado mientras chawarin sostenía su masculinidad con una de sus manos, pruk se mantuvo impasible con el rostro serio, sosteniéndolo de los hombros. Sintió que los minutos fueron eternos dentro del baño con el príncipe, que aunque no le podía ver su rostro, se estaba divirtiendo poniéndolo en esa situación embarazosa.

— Ya puede dejar de sostenerme Duque Panich — expreso chawarin con una sonrisa, yendo al lavamanos para lavarse las manos. — le doy las gracias por ayudarme.

— ¿Hasta cuándo debo soportar su provocaciones su alteza? — añadió con el rostro severo, mirando a chawarin que lo miraba divertido —No cree que ya está grandecito para que se comporte como el futuro rey de Eslovia y deje de ser tan inmaduro.

El príncipe sonrió con burla y de dos zancadas llegó al duque, quedando sus rostros a centímetros del otro. El Duque Panich mantenía su mirada fija en los del príncipe sin mostrarle un poco de miedo a su cercanía. Chawarin deslizo una de sus manos por el cuello del duque, agarrando su mandíbula con firmeza, acercando sus labios provocativamente a los suyos.

El Principe Y El DuqueDonde viven las historias. Descúbrelo ahora