Dulce y Lindo pecado ➳ Yang Jungwon (ADAPTADA)

21

Había terminado de cambiarme para ir a trabajar, salí de mi habitación y pasé por la habitación en la que se estaba hospedando Jungwon, la cual estaba entreabierta, paré de golpe y miré de reojo la puerta, la abrí y recosté mi cabeza en el marco, mientras sonreía.

-Hola Jungwon. -soltó un pequeño brinco para luego mirarme y sonreír, el menor era tan adorable, me gustaba mucho que lo fuese. Observé su uniforme y frunci el ceño.- No debiste de ponerte el uniforme.- él me observó con detenimiento.

-Tengo que ir, noona.- habló en un balbuceo.- Me empieza a ir mejor en la escuela y en verdad no quiero fallarle.- removí mi cabeza un tanto incómoda y caminé hacia él, no podía dejar que esos momentos incómodos arruinaran mi amistad con él o hacerlo sentir peor de lo que ya debía de sentirse.

-Won, se que no me fallarías.- mantenía una buena distancia entre él y yo, no debía seguir confundiéndonos a ambos... pero yo no estaba confundida, estaba segura de que me gustaba mucho, mucho pero no era lo correcto.- Un día no importa, es para que se te baje la inflamación y el dolor, no quiero que vayas tan golpeado, pero para que esos hematomas puedan desaparecer pasaran algunos días.

-Yo puedo inventarme una excusa.- respondió tranquilo.

-No eres un mentiroso Jungwon.- él elevó sus cejas, mientrás esa sonrisa dulce fue cambiada por una un tanto retorcida, nunca había visto aquella sonrisa en su rostro y no era de mi agrado.

-Usted no sabe cuan mentiroso soy.- parpadeé varias veces incrédula, en primera por sus palabras, en segundo por su voz ronca, pero también empecé a hacerme historias en mi cabeza, tantas dudas se crearon en mi cabeza, por su repentino cambio de actitud, dudas que me estaban hiriendo mucho.

-¿Me mentiste cuando dijiste que te gustaba? ¿Es eso? ¿Verdad? - hablé dolida, tratando de no parecer una puta dramática en este momento, sentiendo mis mejillas arder, y sintiendo un tanto de desilusión. Su rostro cambio tanto, volvió de inmediato el chiquillo lindo y se veía muy arrepentido por lo que dijo. Esperaba respuestas, muchas.

-No te mentí .-se puso tan rojo.- Me gustas muchísimo, noona Solo lo dije porque invento muchas excusas para librarme de cosas, a ti no te mentiría sobre mis sentimientos.- dentro de mí, estaba tan aliviada, solo asentí y salí de la habitación.

-Ve televisión y descansa Jungwon, abajo hay comida en el refrigerador y alacena, puedes comer lo que quieras y por favor no hagas tanto desastre, porque te pondré a limpiarlo.- solté una risa. - Pasa un buen día. - bajé a la primera planta y tomé todas mis cosas, y salí de casa.

...

Busqué de manera rápida a Ni-Ki, debía entregarle aquella excusa sin que nadie se diera cuenta, porque no deseaba armar un alboroto con algunos alumnos que tenían esa costumbre de querer hacer mayor el problema de lo que en realidad era.

Lo busqué por varios lugares, pero no lo encontraba, hasta que se me ocurrió la sala de música, Heeseung tenía la manía de hablar con orgullo de varios de sus alumnos y Ni-Ki estaba en la lista siendo uno de los primeros, Heeseung me había comentado que casi siempre en la mañana el menor se la pasaba en la sala de música y olvidé por minutos aquello.

Abrí la sala y la voz del menor me gusto mucho, dulce, potente, hermosa. Tenía talento, al terminar solo aplaudí reiteradas veces, mientras él me miraba sonrojado. Era adorable, al igual que Jungwon, pero no tanto como él.

-Hola Ni-Ki.- saludé, ladeo su cabeza.- Toma. - tomé su mano y deposité aquel papel blanco. - ¿Qué? - chilló con su voz muy aguda, lo observé.

- Jungwon me mataría sí sabe que usted está declarando su amor hacia mí.- reí, a pesar del mal chiste me agradaba bastante.

-No me le estoy confesando Nishimura, no se ilusione. - dije de nuevo con una risa, mientras tapaba con mi mano mi boca. -Es una excusa de Jungwon, no podrá asistir hoy y por favor pasame los apuntes de hoy, para prestárselos a Jungwon.- me miró mientras pasaba saliva por sus labios.

-¿Por qué usted me entregó esto? - era un tipo desconfiado y demasiado preguntón.

-Porque está en mi casa y porque tuvo problemas, como eres su mejor amigo puedes llamarlo en el receso y preguntarle. - me di la media vuelta y giré un poco mi rostro para observalo.- Ve a la oficina para que la validen y luego se la entregas a todos tus profesores, por favor, Nishimura Riki. - asintió, yo me reincorporé y caminé hacia afuera, para ir a la sala de maestros y luego empezar a dar clases.

...

Entré a casa, y observé a Jay sentado en el sillón, mientras parecía hablar muy animadamente con Jungwon, ambos se veían muy cómodos hablando juntos, tanto que de una u otra manera era tan extraño para mí.

-Hola chicos.- ambos me miraron por fin y sonrieron como unos tontos, rodé los ojos.

-Hola Amira. - habló el mayor con cierta felicidad.

-Hola Noona. - sentí mi corazón latir con fuerza, mientras sonreía.

-¿Qué haces aquí Jay? - indagué un poco, mientras él reía.

-Vine a buscar mis libros, te escribí anoche ¿se te olvido? - asentí y soltó una risa nasal, seguida de la risa de de el más pequeño.- ¿Puedes ir a buscar los libros?, los necesito. - asentí y tiré las cosas en una parte del mueble, a zancadas llegué a mi cuarto y busqué los libros que estaban arriba del escritorio, los tomé y baje y se los pase.

-Gracias.- sonrió, mientras los tomaba.

-A ti, cariño. - miré de reojo a Jungwon, quien no parecía estar celoso por aquel apodo que me dijo.

-Hyung ¿no me dijiste que en diez minutos te ibas? - los observé, Jay asintió.- Ya pasaron de diez, no quiero que llegues tarde y seguro que Amira piensa lo mismo ¿verdad?- lo miré y él elevó ambas comisuras.

-Sí lo mismo digo. - Jay se despidió y se marchó, miré sin mucha gracia a Jungwon.- ¿Qué fue eso?

-Celos.- más simple de ahí, no pudo ser, ¿qué le pasaba? ¿el amor lo ponía así de intenso?

-No tienes que estar celoso, tú y yo somos amigos.- observé como tragaba saliva, sera la dura y cruda realidad solo éramos amigos, aunque ambos sentíamos cosas por el otro. Pero yo no lo iba a aceptar ahora, tendría que esperar.

-¿Trajo los apuntes de Ni-Ki? - no me esperaba que cambiara su tema de conversación, pero de cierta forma solo podía aliviarme por eso, así que asentí.- ¿Podría buscarlos? - asentí y busqué de manera rápida en el sofá, saqué el cuaderno y se lo pasé.- Gracias.

-De nada. - decidí ir a mi habitación y cambiarme aquella ropa.

🐱🐱🐱🐱

si hay algún nombre sin editar me gustaria que me hicieran saber.