Estoy cayendo sobre mis pies izquierdos,
dejando las fisuras en carne y hueso,
exprimiendo las nubes de viejos recuerdos,
esperando un diluyente amarillo deceso.Otra vez no he sido asertivo ni opcional,
una vez más nada es equitativo,
nada nos pertenecerá.He suplicado en cada punto a recordar,
he dejado que mi voz sea libertad,
en estas arenas que cortarán,
en este polvo que en espejos arderán.Otra vez he sido opaco, reservado,
en palabras al menos trato,
en pensamientos alejados, enervado.