No es lo que deseas lo que cumplo,
pero creo que es lo que quieres,
de repente el tacto es difícil, imposible,
en segundos, fuera de tu mundo.
Oh. Nunca te importó la ausencia,
llama y volveré a repetir la misma broma,
en la que yo salgo confundido,
oh. Nunca te importó el delirio.
Dices que soy necesario, ¿para qué?,
alguien que haga compañía a tu deleznable soledad,
hasta que encuentres mejores temas que yo nunca podría dar,
tus sonrisas que nunca voltearán a ver.
Todos los esfuerzos inútiles,
se sienten como la nada,
todo lo que hice y haré,
se siente la derrota precipitada.
Oh. Nunca te importó la ausencia,
llama y volveré a repetir la misma broma,
en la que yo salgo confundido,
oh. Nunca te importó el delirio.
No es todo lo que digo una verdad,
no tienes que seguir las cosas al pie de la letra,
rechaza mis rechazos, nunca lo harás,
obediente a lo que diga y dirás...
Oh. Nunca te importó la ausencia,
llama y volveré a repetir la misma broma,
en la que yo salgo confundido,
oh. Nunca te importó el delirio.
Si yo digo déjame, aparece más...
si quiero no verte, sujeta mi cabello,
hazme saber que estás,
y dame momentos bellos...
Pero no sucederá,
todas las cosas tomadas en serio,
dije las cosas con seriedad,
pero nunca quise este final.
Oh. Nunca te importó la ausencia,
llama y volveré a repetir la misma broma,
en la que yo salgo confundido,
oh. Nunca te importó el delirio.
