Reina Atta I

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Capítulo hecho y trabajado duro para DaniaAmely

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Hubo un momento en el que la presencia del nuevo visitante se había encontrado desapercibida para la mayoría de las hormigas, excluyendo a Flik y Atta como la principal encargada en ser consciente de aceptar su estancia en sus dominios.

Lois, así era como se hacía llamar la nueva hormiga, no era muy habladora. Atta no tuvo reparos en comenzar una serie de preguntas totalmente creadas por su gran curiosidad, siendo contestadas de forma corta o insuficientemente atractivas para la nueva reina.

Y mientras las moradas de los demás descansaban en aquel insecto, las voces de Hopper como Flik hacían eco tras sus antenas.

"Desde que ha visto la nueva cámara de gestación, ya no para de hacer visitas al lugar; ¿No le parece sospechoso o mínimamente incómodo, Princesa Atta?", había dicho Hopper hacía poco, y era verdad que parte de la rutina de Lois ahora era recorrer los pasillos donde descansaban las hormigas a la espera de sus huevos.

Fue hace pocos días que comenzaron los preparativos para las nuevas familias venideras, llevaban años sin tener un número tan alto de futuras madres y padres y todo por la liberación de la esclavitud, siendo ahora que Atta descansaba en una roca del interior vigilando los cuidados recibidos a las hormigas que eran atendidas por nada menos que Flik. Después de aquella charla, la hormiga intentaba de todo para mantener su mente ocupada, sin pasar de lado la oportunidad de intentar ser de ayuda.

Ahora era un ayudante más de la doctora Flora, llevando la comida y hablando con los pacientes más preocupados; que para su suerte, llegó a crear nuevas y buenas expectativas sobre el Salvador del hormiguero. Atta había recibido últimamente buenos comentarios sobre Flik, llegando solo a sus antenas por la vergüenza que mantenían algunas seguidoras jóvenes de admitir su anterior pensamiento negativo sobre Flik.

“¿Cómo que hay machos en cinta?”, la voz asombrada del saltamontes llegó desde algún lugar de la sala; Hopper había intentado de todo por no separarse de Flik, llegando alguno a llamarlo el enamorado para referirse a él en sus charlas discretas. 

Y era normal, aunque divertida su gran confusión cuando Flik intentaba explicar su forma de traer crías al mundo. En un principio, antes de la esclavitud, todas las hormigas eran hembras siendo guiadas por su abuela; y se vivía bien en una isla donde apenas existía peligro alguno; se encontraban alejados de la sociedad de otros insectos, llevando a que no fuera necesaria la reproducción masiva. Y cuando nació Aphie, ya no existía esa capacidad de criar huevos que diferenciaba a las reinas de las trabajadoras. Esto llevó a que cuando los números bajaron por muerte natural, la naturaleza decidió otorgar a algunas hembras su sexo contrario, llegando machos completos sin haber perdido sus órganos femeninos. Y siendo de mucha ayuda cuando llegó la esclavitud y apenas existía el tiempo para reforzar lazos o crear familias, su morfología había cambiado ante las comodidades del lugar como las complicaciones recibidas por una reproducción menos agresiva.

Aunque eso no quitaba que en algún momento tendrían que depender de algún otro método para seguir manteniendo el número de hormigas, aunque decidió sacudir aquel pensamiento de su mente con un rápido meneo, llevando su vista de casualidad a la boca del lugar, donde Lois esperaba de pie, observando a los pacientes que se encontraban descansando en frescas briznas de hierba. Algo en el silencio que llevaba consigo aquel trotamundos era cada vez más sospechoso para la propia vista de Atta; las voces de Flik y Hopper volvieron como un recordatorio insufrible de sus preocupaciones.

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⏰ Última actualización: Apr 13 ⏰

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