Un amor... No tan adolescente

Ironía

♠ CAPITULO 14 ♠

Linda:

La verdad, describir lo que sentía por mi hija era difícil... Le tenía rabia, pero la amaba con todo mi ser. No la quería cerca, pero detestaba sentirla tan distante. No quería saber que tuviera que ver con ella, pero me dolía tener que enterarme de sus cosas por medio de Charly. Por eso, siempre resumí lo que sentía por ella a "Una gran contradicción".

Yo sabía que ella sufría por mi forma de ser y de tratarla, pero también sé que yo sufría más, porque constantemente estaba luchando ya que mi amor era tan grande como el odio que sentía hacia ella... Y eso me partía diariamente el corazón, porque no quería odiarla. Era mi angelito, mi razón de ser, mi milagro... Por eso, cuando la trataba mal, me obligaba a tratarla con amor y que ese trato durara el mayor tiempo posible.

—Hola muchachos —Estaba sentada en el mueble que daba hacia la entrada cuando entraron a la casa Dani y Pablo —, pensé que hoy no los vería más, ¿cómo les fué?

—Ay Lili —Me dijo Pablo mientras me saludaba con un beso en el cachete —, la verdad es que mis papás se comportaron pésimo.

—Si mami, me trataron horrible... ¡¿Puedes creer que me hicieron molestar para ver si yo era digna de su hijo?

—¡¿Qué?! —Dije, incredulida —.

—Si Lili... Mis papás se comportaron como si aquella presentación fuese para arreglar un matrimonio...

«En verdad fué muy decepcionante esa actitud.

—¿Pero qué hicieron exactamente? —Pregunté —.

—Para hacer el cuento corto, mami. El señor Pedroza insinuó que mi tatarabuelo tuvo que ser corrupto para sustentar la empresa.

—Que mamagü —Me interrumpí por la mirada de Dani —... Quiero decir, con todo respeto Pablo, pero maleducado fue tu papá.

—Te apoyo en eso... Dani le dijo inmaduro, JAJAJAJA.

—JAJAJAJA ¡¿En serio, hija?!

—Es que, mamá ¿cómo no le iba a decir inmaduro? Tan grande y con esas estupideces de: "pisisti li priibi cin hiniris" —Dijo Dani, burlándose —. Es que de verdad fué muy estúpido JAJAJAJA.

—Bueno, pero les dejaron claro que había sido una gafedad y es lo importante... Si ellos aceptan que se equivocaron, pedirán disculpas y querrán hacer las cosas bien.

—Lo dudo Lili, mis papás no son personas que piden disculpas y menos cuando son conscientes que hicieron algo mal... Si una vez olvidaron buscarme a la escuela, y tuve yo que pedir disculpas por no llamarlos para recordarles que tenían que buscarme.

—JAJAJAJAJAJA, NAGUARA. Tus papás son una cuerda de locos.

—¿Cómo así?

—Ay, si es verdad que eres argentino... Lo que quise decir fué que están muy locos.

—Ahhhhh, ok. Bueno sí, estan locos, y eso que son psicólogos.

—Eso no garantiza salud mental, mi querido Pablo.

—Es cierto.

—Bueno mami, nosotros vamos a mi cuarto. Pablo se va a quedar... Claro, si no hay ningún problema.

—Ah pues, no es la primera vez que se queda... Pero eso sí, pueden estar en tu cuarto, pero a las  10 se van a dormir, y Pablo en el cuarto de invitados.

—Mamá.

—Ya te hablé Eloísa, en el mismo cuarto no van a dormir, y ahorita van a tener la puerta abierta... ¿Entendido?