El profesor nos dio el último cuarto de hora del laboratorio para trabajar en el vídeo.
Desde la primera fila, giré la cabeza para mirar a Rus, le estaba mostrando algo en el teléfono a Omar.
La expresión del Abuelo era bastante graciosa, una mezcla de interés y confusión.
"Chiara" mi nombre sonaba dulce desde los labios de Violeta "tengo una idea para el spot pero tenemos que decidir a qué dedicarlo, algo alternativo y divertido... no sé, dime algo que te guste".
La petición me pilló por sorpresa, "tú" le contesté .
En mi cabeza, claro.
"Pues... cantar, componer, beber...", respondí, en su lugar.
Ella sonrió y me interrumpió diciendo: "Me refería a cosas concretas, como... ¿kiwis?".
"Por favor, no, los odio", respondí.
Había dicho la cosa que más asco me daba en el mundo.
"Siguiendo en el ámbito culinario, quizá sea la opciòn mas fácil, ¿qué tal el sushi?", añadí.
"Buena elecciòn, pero me parece demasiado común... algo mas especial..." dijo ella.
"¡Los sochniki!", la interrumpí.
Eran deliciosos dulces ucranianos que me habìa hechio descubrir Rus.
Violeta abrió los ojos y se rió: "Vale, quizás un poco menos especial que lo que sea esto".
A su vez, propusimos otros alimentos, pero ninguno parecía ser el perfecto.
Nos quedamos en silencio unos minutos, pensando.
Entonces... Soy Kiki, me gusta la Navidad, me gustan las chicas....
"¡¿El yogur lima limón?!", exclamé de repente.
"Dios mio, qué susto" dijo ella, "A ver, poco común... original, me gusta!".
Levanté la mano para golpear los cinco y ella la cerró al mismo tiempo para darme el puñetazo. Así que yo la cerré y ella la abrió.
Nos echamos a reír.
Un tierno hoyuelo apareció en su mejilla derecha.
Orgullosa, miré a Rus. No me sorprendió verla con la cabeza apoyada en el hombro de Omar.
Una vez encontrado el tema del vídeo, teníamos que pensar qué hacer y cómo organizarnos.
Hablamos de ello durante unos minutos hasta que la clase terminó.
Violeta me saludó y se marchó deprisa.
Me sentía cómoda con ella, aunque nuestras conversaciones sólo se basaban en cosas del curso, parecía que estábamos empezando a conocernos.
Recogí mis cosas para llegar a Rus y vi una bufanda verde oscuro entre mi silla y en la que estaba sentada Violeta.
La tomé e inmediatamente pensé que era suya.
Tenía un olor fuerte, floral.
La puse en mi mochila, habría pensado qué hacer con ella más tarde.
Vi que Rus despedirse de Omar con un abrazo.
"Madre mía Rus, ¿Coqueteas con el Abuelo?".
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Por pura casualidad
FanfictionChiara es una estudiante universitaria, apasionada de la música, Violeta estudia comunicación. Las dos se conocen gracias a amigos en común, pero su relación se limita a breves sonrisas de cortesía. La situación parece cambiar cuando una coincidenc...