#3 Incorrect (K N J +21)

Quince

Namjoon

Claro, si me oculto a mi media hermana por más de veinte años, un medio hermano más, sobre todo si nació antes que yo. Me da rabia saber que lo protegió. Terminé siendo el hijo de la otra mujer.

Pues mi madre fue después de la de Kirisha y Seokjin. Mi padre fue débil, yo no hubiera dejado que me alejaran de la mujer que amo.

En estos momentos no se que pensar, no es el líder, nadie sabía de quien era hijo, sin embargo sabe como se mueve todo, ha mantenido el territorio de Daegu sin problemas, conocen su nombre y causa el terror que causa el mío.

El rey de las sombras.

Si actitud es infantil y su personalidad no tiene nada de aterrador, pero su maldito control.

Kirisha me pidió que lo dejara ayudarme, lo defiende tanto.

Pero no lo ve de la misma manera que a mi.

Se abrió la puerta del gimnasio, yo solo miré de reojo mientras bebía tranquilamente de la botella.

—Son las  dos de la mañana.

—No puedo dormir.

Kirisha me observo con el ceño fruncido, se que esta molesta. Desde que su hermano apareció no la he tocado.

—¿Por qué estas molesto? —no le conteste, subí a la caminadora y comencé a trotar —Eres un mocoso berrinchudo, estas haciendo una rabieta ¿por qué? ¿Por qué Jin te ayuda?

—No pedí su ayuda.

—Pero la necesitas, Oppa no esta haciendo nada en tu contra —pare la caminadora, esa maldita palabra de nuevo.

—No le llames asi.

—¿Es enserio? Tu berrinche ¿es por que le digo oppa a Jin?

Baje de la caminadora, la tome por el cuello y la cintura acercándome a sus labios.

—Si, esa es mi molestia, esa puta palabra.

—Eres un idiota —jadeo —un niño grande —me miro a los ojos —no son lo mismo, Jin es mi hermano mayor, tu eres mio Nam.

La bese, atrapando su labio con mis dientes, se pego más a mi, bajo la bata de seda no llevaba nada.

—Odio que le llames así —subí mi mano por su rostro tallando sus labios con mi pulgar —no me agrada, tu eres mía, aunque sea porque son familia, me irrita escucharlo de ti para otra persona, dime kirisha, dime que no le dirás de nuevo así.

—Enfrente tuyo no lo hare —chupo mi dedo pulgar —como recompensa, quiero que me folles…Daddy.

Baje mis pantalones, la gire y la hice verse al espejo del gimnasio al penetrarla.

—Tu eres mía Kirisha, ¿yo que soy?

Empuje más fuerte haciendo que su cuerpo se arqueada ante el golpeteo.

—Mi Daddy.

No tiene ni puta idea del monstruo que acaba de crear.