El hermoso Oregon, un lugar para admirar la naturaleza... Con sus hermosos bosques y casi perpetua vista otoñal. Sus perfectos lagos y cascadas... Y hablando de cascadas, hay un lugar llamado Gravity Falls, un pequeño pueblo lleno de peculiaridades, gente linda y amistosa...
Y adolescentes raros.
La paz en el centro de la cuidad fue interrumpida por el chirriante derrapar de las llantas de una mamá-ban, la cual iba a toda velocidad chocando con cuantas cosas pudiera.
Dentro del vehículo se escuchaba una canción que aludía al verano, "cake by the ocean" que indiferentemente de lo que pudiera significar la canción, el ambiente era de pura diversión.
Gritos y gritos por parte de Mabel, Nate, y Lee, que alentaban a la conductora, Wendy, a ir más rápido; Thomson por su parte también se reía con ellos, aunque un poco más preocupado por su vida; Robbie vibraba con la música mientras su novia Tambrie grababa todo.
Por último, teníamos a Ben, un chico que por primera vez experimentaba algo como esto, y aunque adrenalina le resultó muy divertida y la situación le parecía impresionante, estaba más concentrado en otra cosa...
Ben tan solo escuchaba la dulce y tierna risa de un muchacho de cabello castaño, el cual, ya sea por los nervios o la emoción, no podía parar de sonreír y soltar carcajadas por las locuras de sus amigos.
En un dado momento, Dipper notó que el rubio lo estaba viendo atentamente, a lo que solo pudo soltar una risita nerviosa.
Dipper – Jeje... ¿qué pasa? –
◬ - Je, nada – Le regaló una sonrisa, cerrando suavemente los ojos con ternura.
Wendy tomó camino por la carretera que rodeaba la cuidad, la cual estaba casi todo el tiempo vacía, Una vez el ambiente se calmó, miró por el retrovisor, notando a su amigo Zipper mucho más tranquilo y sonriente.
Wendy – Hey! Dipper! Creo que ya estás mejor. Te veías algo tenso hace rato. – Dijo con una sonrisa alegre y sin desviar su vista del camino.
Dipper – Hemm... jeje, si... Creo que solo necesitaba relajarme un poco. – Sonrió con algo de pena.
El muchacho miró nuevamente al rubio que se sentaba en el lugar de en medio, recordando que hasta hacía un momento, él era la causa de su nerviosismo. Cruzaron sus miradas, lo que les provocó un suave sonrojo a ambos. Dipper quiso desviar la mirada, aunque al hacerlo solo se topó con la cara de su hermana, quien estaba sentada al otro lado del asiento, junto a la ventana, viendo a ambos con una peculiar cara pilla y una sonrisa.
Dipper se rio un poco por la cara de su hermana, aunque con algo de pena por sus ojos sugerentes. No fue hasta que la sonrisa de su hermana se empezó a llenar de cierta malicia que Dipper se preocupó.
Repentinamente Mabel gritó desde la última fila de asientos, donde se encontraban, con una divertida y para nada peligrosa idea.
Mabel - ¡WENDY! Hay que hacer donas con el auto!!! –
Dipper – Oh no... -
Wendy – ¿Donas en honor el chico nuevo de la panadería? Hecho!!! –
Wendy bajó su mano para subir el volumen de la música, acto seguido dio un volantazo para adentrarse en el bosque, el cual conocía muy bien.
Gritos y gritos se dieron dentro del auto mientras la chica conducía hasta un claro en el bosque, donde sin previo aviso, la pelirroja empezó a derrapar el auto en círculos, quemando llanta en el suelo.
-¡¡Wen.dy!! ¡¡Wen.dy!! ¡¡Wen.dy!! –
Mientras que la mayoría gritaba alentando a la leñadora, Thomson sacó la cabeza para vomitar la crema batida de hace rato, al mismo tiempo que Tambrie lo grababa y todos se reían...
Y gracias a las leyes de la física, por la fuerza de los giros y por haber estado sentados hasta atrás, Ben y Dipper terminaron pegados a la puerta sin poder moverse.
Ben intentaba hacer fuerza con sus brazos para no aplastar el muchacho, acorralándolo íntimamente contra la pared del auto.
Dipper igual intentaba separarlo, tocando su pecho e intentando empujarlo, pero solo logrando resbalar sus manos, provocando así, el escenario perfecto para un abrazo digno de una película de adolescentes.
El mayor le miraba desde arriba con sorpresa y Dipper le miraba desde abajo con nervios. Ambos con el corazón palpitando como loco, tan cerca el uno del otro que podían escucharse las respiraciones...
Estaban pegados como hacía un rato en la cocina de la panadería, sin embargo, ahora era diferente, ahora no venían de una discusión, si no de estar solo tonteando y sonriéndose como tontos.
Inevitablemente se les escapó una sonrisa desde su pecho y se empezaron a reír como bobos... Y sin querer desaprovechar, Ben se pegó un poco más a Dipper frotando su nariz con sus mejillas rojas y riendo muy cerca de su oído... mientras el muchacho, que aún tenía sus manos sobre el cuerpo de Ben, cerró los puños apretando y jalando un poco su ropa, como aferrándose a él mientras risitas se salían de sus labios.
Cuando finalmente las vueltas pararon, todo mundo volvió a su lugar.
Nadie se percató de lo que había pasado entre los chicos de hasta atrás, pues todo mundo estaba distraído viendo a Thomson vomitar.
Todos menos Mabel, quien, resistiendo las ganas de vomitar por la fuerza centrífuga en su estómago, pudo sostenerse del cinturón para no moverse de su lugar, logrando capturar en una hermosa foto lo sucedido entre ambos muchachos.
Mabel – 7U7 -
Cuando Dipper se dio cuenta de lo que hizo su gemela no evitó ponerse rojo como tomate; sin embargo, sin hacer ruido alguno, Mabel tan solo le sonrió, se guardó la foto en su suéter e hizo una seña que Dipper bien conocía...
"Mabel lo aprueba"
...
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No Estoy Mintiendo ◬ Este es mi escape mental
Fanfic¡Qué viva la rareza! Los gemelos Pinnes, Mabel y Dipper, quizá los hermanos más unidos en todo el mundo regresan finalmente a Gravity Falls!!! Ya no son niños, ahora su mundo se expande a rarezas de la adolescencia y poco a poco piden su espacio, au...