Devil in her heart

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Ringo y George estaban pasando la tarde haciendo un picnic en un parque sombrío de Transilvania. Ringo estaba descansando en un árbol.

-Sabes, Ringo, este lugar de Transilvania no está nada mal una vez que te acostumbras.-Le dijo George al menor.

-Si, pero todavía me quedo con Liverpool.-Responde con tranquilidad.

-Mira este hermoso ataúd de picnic que empacaron para nosotros.-señaló George.

-Te refieres a la cesta de Picnic, ¿No?-Dice Ringo aún con los ojos cerrados.

-No, me refiero al ataúd-Contestó Harrison mientras levantaba el pequeño ataúd y lo abría- voy a ver que tiene adentro...

George sacó un frasco con cosas verdes adentro.

-Hay un frasco de alcachofa... Hum...-Luego sacó una lata rectangular- Papas fritas...-George sacó la tapa de la lata y se llevó con una sorpresa desagradable- o tal vez prefieras unas morcillas hechas con sangre real...

Ringo abrió los ojos de repente y se asustó al ver a George con una bolsa de sangre conectada a un chorizo.

-No gracias, George, simplemente perdí el apetito.- dijo Ringo con sinceridad- Creo que daré un paseo y disfrutaré un poco del paisaje.

-Bueno, no te alejes demasiado-le advirtió George- me dicen que hay unas  extrañas criaturas poderosas viviendo en este bosque.

-Oh, George, tu y tu tonta superstición. Además, ¿No ves que conseguí un anillo mágico para protegerme de los espíritus malignos?-dijo sin mucha importancia Ringo mientras se iba.

George miraba como se iba- Simplemente no puedo evitar preocuparme de Ringo. Saben, a veces es como un niño pequeño...

Volviendo con Ringo, él estaba perdido por ahí en medio del bosque.

-Será mejor que regrese. George siempre necesita a alguien detrás de él. Pobre tipo...-Dijo Ringo acerca de su compañero mientras caminaba hacia unas señales-Pero... ¿Cuál es el camino de vuelta..?-Viéndose indeciso.

-Ah, ahí viene alguien ahora...-Se alegró el narigón.

Un jinete sin cabeza se detiene cuando Ringo lo llama.

-Disculpe, compañero, ¿Podrías decirme el camino hacia el terreno de Picnic?-Preguntó amablemente Ringo.

-Lo siento, amigo, pero nunca tuve facilidad para las direcciones- Le contestó sinceramente el jinete mientras se iba.

-Seguro que hay muchos idiotas viviendo en estos caminos-dijo Ringo mientras se rascaba la cabeza- Oh, bien, lanzaré una moneda. Si sale cara, voy por el camino izquierdo.

Ringo sacó una moneda y la lanzó al aire para ver que tocaba, pero al final le salieron alas de murciélago y se dio a la fuga. Ringo la empezó a perseguirla corriendo y con un puño al aire.

-¡Vuelve aquí!- Gritó agitado- Puedes volar ahora, pero pagarás después-Ringo termina dando una risa al final, pero choca con una casita y queda tirado en el piso.

Una bruja abre las ventanas.

-Pero por el nombre de Drácula, ¿Qué esta pasando aquí?-Preguntó con tono furioso.

-Lo siento, señora, estaba persiguiendo un dinero desboscado.-Se disculpó Ringo.

La bruja suspiró- Oh mi dios, eres hermoso.

-¿Quién, yo?- Preguntó con inocencia Ringo y apuntándose al pecho.

-Tu eres la respuesta de lo que las brujas desean. Ven adentro, te espera un plato de sopa.

-Muchas gracias, espero que sea de pollo y fideos...

-Oh, que buen sentido de humor tienes , me gusta eso en un marido.-Rio maliciosamente la bruja mientras tomaba de los pelos a Ringo y lo metía adentro

-Uhhh... ¿Marido?-dudó Ringo.

-Puedo cocinar-La bruja movió su mano y hizo aparecer manjares en la mesa- Hacer mi propia ropa...-Tomo su escoba y empezó a volar en círculos- También andar en escoba.

La bruja bajó de su escoba y la dejó a un lado.- Y ninguna otra ama de casa puede hacer todo eso- la bruja movió su mano otra vez y hizo aparecer una escoba debajo de las piernas de Ringo- Ven, vamos a volar juntos. Incluso te conseguí tu propia escoba...

-Si, es una oferta tentadora, señora, pero me temo que tendré que rechazarla...-Dijo Ringo sacándose la escoba de las piernas.

-Veo que tendré que usar un poco de estrategia en este caso-Se dijo para sí misma la bruja y se fue para una repisa llena de libros.- Siéntate mientras preparo un poco de mi sopa especial-Rio malvadamente mientras preparaba una poción de amor y la depositaba en una pistola.

-Esto no te dolerá ni un poco, mi mascota. Sólo abre la boca y di ''Ahh''-se acercó a Ringo de manera amenazadora.

-Hey, ten cuidado, esa cosa puede estar cargada.-Advierte Ringo.

-Lo está... Con poción de amor-Apunta hacia Ringo pero falla por que salió corriendo justo a tiempo.

Ringo fue perseguido por toda la casa e incluso en escoba y intentando ser el punto blanco varias veces pero fallando, por un descuido calló a una chimenea y la bruja aprovechó que estaba algo mareado por el golpe para poder atinarle a su corazón, pero alguien toca la puerta y se escucha una voz familiar.

-Ringo, ¿Estás ahí?

-¡Es George!- Al baterista se le dibujó una sonrisa al escucharlo.

-Me parece que es muy tarde como para salvar a tu amigui...-la bruja se resbala y cae en el caldero.

George logra abrir la puerta, su expresión mostraba preocupación y sorpresa.

-Con que ahí estabas-Dijo el guitarrista sin soltar el pómulo de la puerta.

Ringo salió corriendo a saltitos y se abalanzó hacia él y George intentó sostenerlo de alguna manera.

-George, viejo amigo, me salvaste de un destino peor que la muerte.-Exclamó con felicidad el baterista. Para ese momento, George lo sostenía de los hombros.

-¿De qué estás hablando?-Preguntó el guitarrista.

-De la vieja bruja que se quería casar conmigo-Señaló el caldero.

-¿Qué vieja bruja?-Preguntó confundido George.

-La que está en la caldera, por supuesto.-Señaló algo alterado con ambas manos.

De adentro de la caldera sale una hermosa bruja rubia, la cual sedució con tan solo una mirada a Ringo.

- Habba habba gubba chubs, haber sufrido antes puede pagarte un poco más tarde, George. APARTARE -Ringo estaba montando una escoba y estaba persiguiendo a la muchacha.

George se queda viendo desde el marco de la puerta.

-Adolescentes... Nunca los entenderé...-Dijo George mientras se hundía en hombros y ladeaba una vez la cabeza para luego meter sus manos en sus bolsillos y  seguir viendo a Ringo ser... Ringo.


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