Matsuno Chifuyu
El ambiente se volvió algo incomodo. Ninguno de los dos decía palabra alguna, y una que otra mirada se cruzaba entre nosotros. <<¿Qué se supone que debo decir?>> Empecé a sudar de los nervios.
Vi como Mina se quitó el saco y la corbata de la escuela. No era la primera vez que la veía pero esta vez era lo único que podía apreciar. Había quedado embobado viéndola de espaldas desde aquí. Si, es cierto que era la viva imagen de Baji-San pero era encantadora.
Comenzó a sacar ciertos implementos para poder tratar mis heridas, sus manos se movían tan delicadamente que costaba creer que su hermano le había dado una paliza a unos tipos un par de horas antes. Se arrodilló frente a mi recogiendo su corto cabello en una cola para que no estorbara en el procedimiento, y remangó las mangas de su camisa. Quedé en blanco...
—Bueno... puede que esto te arda un poco...— Mojó un poco el algodón en alcohol y lo acercó a mi rostro. —¿Estás listo?— Yo solo asentí viendo directamente a su rostro. Un minuto, está haciendo mucho calor... ¡¿Estaba sonrojándome?!
—Mina-San... ¡Ay!— Hablé pero un pequeño ardor en mi mejilla me hizo callar.
—Lo siento... Y solo llámame Mina. Mina-San suena algo raro— Rio. ¿Acaso esto es el cielo? Jamás había tenido suerte hablando o tratando con chicas y justamente una estaba frente a mi sonriéndome.
—Disculpa...— Reí nervioso. —Mina, siento que tengas que hacer esto...—
—No es nada. Estoy... algo acostumbrada...—
—Creo que... puedo imaginarlo—
Me perdí por un momento en sus ojos mientras ella seguía aplicando el algodón en mi rostro, tratando de ignorar el ardor que sentía. Era extraño estar así, tan cerca de Mina fuera de la escuela. Nos conocíamos de vista, claro, pero nunca habíamos hablado mucho más allá de ciertas palabras en clases. Ahora, sin embargo, estábamos aquí, compartiendo este momento, y me sentía un poco fuera de lugar.
Pero de repente, el silencio se rompió cuando Mina soltó una risita.
—¿Qué pasa?— Pregunté, sintiéndome un poco confundido por su reacción.
—Nada, solo me hace gracia verte así de... vulnerable— Dijo con una sonrisa traviesa, y eso solo aumentó mi confusión. —Siempre te veo enojado o serio... o peleando con alguno de tercer año, y... verte así es algo que no pensé que vería alguna vez—
Traté de mantener la compostura, pero era difícil cuando estaba tan cerca de ella. Su cercanía me hacía sentir una extraña mezcla de nerviosismo y emoción que nunca antes había experimentado. Espera... eso significa que ¿Ha estado observándome?
—L-lo siento, no quiero ser una molestia— Dije de nuevo, sintiéndome un poco avergonzado por mi reacción y por no saber cómo actuar en esta situación.
Mina se detuvo por un momento y me miró con ternura.
—No eres una molestia en absoluto, Chifuyu— Dijo con sinceridad, y su voz suave y reconfortante hizo que me sintiera un poco más tranquilo.
Me sentí agradecido por tenerla cerca, por su amabilidad y su cuidado. Y tiempo después, ella se convertiría en alguien especial que había llegado a mi vida en el momento justo.
Minutos después, Mina había terminado de curar mis heridas. Era hora de irme. Me despedí con la madre de los hermanos Baji y salí de su departamento. Mina me acompañó hasta afuera.
—Te agradezco mucho por lo que hiciste por mí hoy, Mina-San...— Le dije con sinceridad.
—No es nada. Siento que Kei te abandonara aquí... en su propia casa...— Dijo avergonzada.
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Yūgen - Matsuno Chifuyu/Ryusei Sato X OC
FanfictionYūgen "Literalmente quiere decir profundo o misterioso, y se refiere a un conocimiento del universo que evoca sentimientos emocionales que son inexplicablemente profundos, y que es demasiado misterioso para las palabras, como por ejemplo la triste...