Repítete a tí misma que realmente se han ido.
El tiempo ha probado que pasar forzándote a tí mismo a creer una mentira es algo tonto.
Es la forma más efectiva de lidiar con los problemas que no puedes controlar.Analiza cada una de las palabras que escuchaste.
"¿Fue esto una señal de que las cosas estaban yendo mal?".
No, no. Tu fuiste la que se preocupó demasiado, no ellos. Quedate despierta por la noche mirando tu teléfono.
Tratando de reunir valor para transformar esos demonios, esos recordatorios constantes de tu soledad en nada más que un mal sueño.
Sal a tomar té cuatro veces a la semana.
Siempre lleva tu libreta, nunca dejes de escribir.
Deja pequeños comics y notas de agradecimiento con tu propina.Miralos sonreir mientras te subes al coche.
Habla bajo contigo misma cuanto sea posible."Mi vida es una mierda porque lo merezco, ¿verdad?"
Ya te es imposible llorar.Evita a tus amigos durante semanas aunque ellos son el único sentido de consistencia que queda en tu vida.
Si ellos realmente quisieran verte ellos vendrían, pero no lo harán (¿a quién le importa?)
Dejate perder interés en las cosas que amas.
Convertite en un personaje secundario de tu propia película.No necesitas a otras personas para alejar tu soledad, sólo necesitas encontrar una forma de hablar con ella.