Fluir

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Me abrí para ser escuchada y fuí totalmente ignorada.

Los ojos hinchados irrumpen mi visión
, solo soy una chica a la que no le prestan atención y me duele,
duele ser yo,
porque yo los escuché y ustedes a mí no.

Ella me salvó y me entendió,
ahora no queda más nada entre nosotras dos.

Mi prescencia suplica desaparecer pero sigo de pie porque no voy a volver a mi peor etapa,
en la que lloraba por las madrugadas esperando a ser escuchada.

Me acosté mirando a la ventana,
lágrimas caían por mi mejilla pensando en si merecía ser comprendida.

A veces me pregunto si soy difícil de amar porque por más que ustedes me odiaran yo siempre las escuchaba,
ustedes eran mis amigas y las necesitaba.

La noche cayó y yo me acostumbré al suelo del baño, en donde pasaba la mayor parte del año.

Si tuviera más tiempo te prometería una salida de nuevo,
pero el suelo se está acabando y mi corazón se está estrujando.

Me duele tanto sentir,
odio el ruido pero a veces el silencio habla más,
me siento una tonta al pensar que vas a volver, dejame vivir en paz,
no vuelvas si no me querés ver más.

escritos de un alma que busca existir Donde viven las historias. Descúbrelo ahora