Me gustaría amanecer viendo tus ojos,
en aquellos ojos que me perdí el día que te conocí.A mi lado,
la prescencia ajena me inquieta,
una sensación de incomodidad que aprieta.
Las miradas curiosas me observan con recelo, juzgando mis elecciones,
creando un velo.En silencio,
siento el peso de la mirada,
en un entorno que no comprende mi alma enamorada.
Las conversaciones se vuelven espinosas,
temas que evito compartir por temor a las cosas.Mis experiencias y amores quedan ocultos,
en un mundo donde la diversidad aún es tumulto.