30 Días OTP (Bombwin)

⭐Día 9⭐

Saliendo con amigos
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-¿Estás... Seguro que esto es buena idea? Digo es totalmente cuestionable...pensé que irían a comer helado o tal vez molestar patos...no esto -Un joven moreno se acercó sutilmente a su pareja.

Quien sonreía con malicia, mientras preparaba un bolso negro para cometer una de sus tantas cuestionables o, posiblemente, ilegales travesuras.

-Es solo una pequeña salida con mis amigos. Prometo que luego saldremos con los tuyos ¿Si?. Fue algo difícil convencerlos para que vinieras, pero acá estás. Creeme si todo sale bien les vas a caer mejor -Julius terminó con el bolso y palmeo los rizos ajenos con algo de rapidez.

-No creo que me importe carle bien a tus amigos, Julius... ¡Menos por esto! - Insistió Darwin al ver que ya todos estaban listos para hacer lo que Darwin ya se imaginaba.

-Vamos Darwin, es solo una pequeña travesura...

-¡Julius robar una tienda no es una mera travesura! ¡Es un delito! -Un dedo índice pronto cubrió su boca interrumpiendo su oración.

-Shh... Solo quédate aquí... Ya vuelvo -El moreno se quedó algo confundido por aquella interrupción. Viendo como su pareja corría entre risas hacia su grupo... Darwin sabía que nada bueno iba a salir de ahí.

El tiempo paso, por lo menos unos varios minutos, mientras Darwin esperaba inquieto la llegada de Julius. Quería regañarlo, ya estaba molesto con sus acciones tan deplorables. No podía creer que aún siguiera haciendo las mismas cosas pese a haber salido de la secundaria hace dos años...

Pronto un escándalo saco a Darwin de sus pensamientos. Observo algo alertado el lugar donde provenía dicho escándalo. Sus sospechas era claras, aquel griterío se debía a Julius y su grupo.

De repente aquel grupo se asomo apresurado a Darwin. Julius llegó con aquel bolso lleno de dinero y otras cosas, empujándolo contra Darwin.
Aquel rizado se sentía aún más alterado que antes, realmente estaba siendo cómplice de aquello...

-¡Vamos Darwin!... - Alentó aquel peli-gris entre tanto griterío.

Las sirenas de la policía, las risas de aquel grupo y los gritos lejanos de la gente que los señalaba, hacían que Darwin estuviera al borde de entrar en pánico.
Sin darse cuenta, Julius lo elevó sobre el piso, cargandolo sobre él para empezar a correr entre risas y conjunto a su grupo.

-¡CORRE! -Grito el joven palido, mientras se reía y cargaba al moreno. Quien sentía que pronto expulsaría por la boca todo su almuerzo...

[...]

-Y...¿cuánto tiempo planean tardar? -Cruzo sus brazos aquel chico de ojos grises.

-No mucho, no te preocupes - Comento Darwin sonriente y animado por aquella salida entre su hermano y pareja.

-Eso espero. Si tardan demasiado la tienda de videojuegos va a cerrar y yo quiero comprarme ese jodido juego que he esperado por años -Anuncio Julius.

-Yo sigo esperando a que te pise una bicicleta... -Murmuro un felino receloso de la presencia de Julius allí.

-¡Gumball!

-Se abstuvo a decir algo peor, eso es nuevo -Se burlo el peli-gris.

-Bueno, ya regresamos Julius. Quédate acá ¿Si? -El moreno sonriente se asomo a su pareja y le regaló un pequeño beso en la mejilla -Prometo que podrás comprarte ese juego -Se despidió animado del joven.

El tiempo paso y Julius ya se sentía algo fatigado de esperar. Faltaba al menos una hora para que esa tienda cierre ¿Qué diablos fueron a hacer esos dos?
De repente un explosión aturdió los oidos de Julius. Rápidamente y asustado busco con sus ojos el sitio de donde pudo provenir ese ruido, sin embargo justo de ese lado venían corriendo Darwin y Gumball aterrados.