Momentos Shinmono

Por ti

Neito abrio la boca

-¿Que?

-Que soy alergico a los mariscos

Repitio Hitoshi mientras miraba la televicion. Hace rato estaban hablando tranquilamente cuando surguio el tema de las alergias, Neito menciono su leve alerguia al pelo de gato que realmente podia controlar, y Hitoshi menciono su alerguia a los mariscos. Cosa que dejo en shock al rubio, porque asi como Hitoshi era amante de los gatos, el era fanatico de los mariscos

A exepcion de que Neito podia estar cerca de un gato durante mucho tiempo solo teniendo la nariz tapada, ojos llorosos y estornudando varias veces al dia, pero Hitoshi era altamente alergico a los mariscos, un bocado e iria en ambulancia directo al hospital

Y vive en japon

Por ello el siempre salia con una jeringa de emergencia y una receta medica, ya que usualmente no sabia si la comida tenia el toque a mariscos que luego se ponia para realzar el sabor

Neito no dijo nada ante esta noticia. Porque ¿Que podia decir? El amaba los mariscos, eran de sus comidas faboritas y aunque odiaba la idea de no poder comerlos, pero, amaba aun mas a Hitoshi y no queria perderlo  menos por algo tan absurdo como la comida, el podia sobrevivir sin comer mariscos. Hacique el estaba decidido, habia tomado una decicion, que le dolia, pero que seguro se le pasaria con el tiempo

-Pues estas de suerte mi amor, porque odio los mariscos

.....

-¿Y porque le mientes? No creo que Hitoshi sea tan inmaduro para odiarte por amar algo que lo puede matar, digo, tu lo amas aun con tu alaergia a los gatos

Dijo Kendo comiendo una cucharada de su helado

-No lo entiendes, su alergia lo podria matar, a mi no, yo solo tengo que tomar una pastilla cada cierto tiempo y se me pasa

-Aun asi creo que el lo entenderia si se lo explicaras

-No

Kendo suspiro. Su amigo era terco como una mula encerio

Al final la chica no lo pudo convencer de lo contrario, hacique solo se resigno a ver como acabaria aquello

....

Duro mas de lo que penso. Neito estaba orgulloso de si mismo, un año entero sin comer mariscos, ni uno solo, habia evitado con exito el demostrar su amor por estos, haciendo muecas ante el olor o solo evitando mirarlos, casi como si los despreciara

A esta punto juraba que hasta el se habia creido su propia mentira. Pero claro que todo su esfuerzo se fue al caño mientras estaban en un viaje de vacaciones en la playa. Intento resistir los mejor posible, pero el simplemente verlos le hacia ruguir el estomago y babear por ellos. Por suerte solo paso cuando Hitoshi no andaba cerca, porque el no se hacercaba demaciado a los puestos de comida

Hacique mientras el pelimorado estaba en otra parte haciendo quien sabe que (Neito por el antojo ya no prestaba atencion a lo que decia el otro) se escabullo a los puestos de comida y empezo a comer

Apenas dio el primer bocado suspiro de alivio. Juro que vio a las personas de los puestos reirse de su reaccion, pero eso no le importo, solo se concentro en disfrutar de cada bocado

Cuando porfin termino se quedo recostado en la mesa saboreando aun aquel sabor. Hasta que un sonido lo llamo, miro hacia arriva paralizandose al instante. Hitoshi lo miraba con un rostro divertido mientras bebia una limonada

-¿Que haces aqui?

-¿No es obvio? Vengo a acompañarte a comer, aunque por lo que veo ni me esperaste

Neito sintio su rostro arder

-No es lo que parece

-Si claro, pude verte de lejos disfrutar de esto como si no hubieras comido en decadas

Neito gimio enterrnado su rostro totalmente rojo entre sus brazos

-Lo siento

-¿Porque? No es la primera vez que comemos en diferentes horas

-Me refiero a los mariscos

-¿Que tiene de malo?

-¿No lo vez? Eres alergico a ellos

-¿Y? Yo nunca dije que no podias comerlos, solo te lo decia porque si hibas a hacerlo, no me besaras hasta que se te quitara el olor a pescado de la boca

Neito rio

-Esta bien, esta bien ¿Desde cuando lo sabes?

-Me lo dijo Kendo antes de venir

-Debi suponerlo

-Me advirtio que tuniera cuidado con besarte porque seguramente no aguantarias e iriras a comer en algun descuido mio. Y tus miradas de amor hacia los puestos de comida solo lo hicieron mas evidente

-Dios intente aguantar todo lo que podia, pero fracase

-Para mi eso no ni de cerca un fracaso. Aguantaste un año sin comerlos, me sorprende, aunque tambien me entristese

-¿Porque?

-Ya sabes, te prohibi algo que amabas de forma inconcien-

-¡No! Yo solo me lo prohibi, tu no tubiste la culpa, lo siento por mentirte

-Esta bien. Almenos ahora se que darte de comer cuando andes de malas

-Oh vete a la mierda Hito, oh, no mejor, sabes que, dame un besito

Hitoshi palidecio

-¡No! ¡Monoma malo! ¡Alejate de mi! ¡Alejate de mi!

-¡¡Nunca!!

Ambos empezaron a correr por la playa mientras disfrutaban de dia. Obviamente no lo beso pero si se divirtieron corriendo de un lado a otro buscando molestarse