Momentos Shinmono

Cartas en el asunto

Un chico rubio entro a un cuarto oscuro y sucio, hizo una mieca ante el olor pero rapidamente esta cambio a una triste al ver al sujeto botado en la cama. Otro chico pelimorado que se notaba que no se bañaba en almenos una semana, el rubio entro con cuidado y dejando la puerta abierta para que esta iluminara un poco la habitacion y no termine pisando algo que no debe. Camino hasta llegar junto al otro, quito la basura y se sento a lado suyo, poso su brazo sobre sus hombros y lo recorgo sobre el, como un gesto reconfortante. Se quedaron alli un buen rato hasta que el pelimorado estallo en llando, el rubio se quedo en silencio a lado suyo palmeando de vez en cuando su cabeza. Despues de un tiempo, el pelimorado se calmo lo suficiente para hablar

-Gracias por estar aqui

-Siempre lo estare

Hubo otro silencio que rompio el pelimorado

-Ella me termino por mensaje de texto esta tarde, despues de que la confronte al mostrarle unas imajenes de ella engañandome con otro

-Era una perra

-....Si....

-Y la amaba tanto

Mientras su amigo volvia a sumergirse en su almoada. Neito, fruncio el ceño. Hitoshi, su mejor amigo siempre parecio tener una maldicion en el amor, no importaba que hiciera, que tanyo se esforzara o con quien estubiera, sus amorios siempre terminaban horriblemente mal. A este punto era absurdo pensar en la cantidad de parejas que el chico habia tenido y que ninguna funcionase. Repito, jodidamente absurdo

-Sabes

Neito hablo mirando al techo, llamando la atencion de su amigo

-Si dentro de dos años aun no puedes conseguir pareja. Yo me casare contigo

-....¿Eh?

-Yo me caso contigo. Tu no te quedas solo y yo obtengo los beneficios de un casado

-Jajaja...¿Es una promesa?

-Sip ¿Trato?

-Trato

Ambos chicos chocaron sus puños y despues se pusieron a jugar videojuegos

.........

Hitoshi temblaba de los nervios, se sentia extremadamente emocionado, miro al padre frente suyo y sonrrio, despues miro a sus amigos, quienes estaban vestidos de negro y con vestidos elegantes, sus padres al frente llorando de la felicidad y otros aun platicando de lo que sea. El chico estubo a punto de revisar su reloj cuando la puerta al final del pasillo se abrio. Hitoshi sintio como todo su estres se fue y la felicidad se apodero de su ser

Neito, con un traje blanco con un gran ramo de rosas rojas en manos y siendo guiado por su madre al altar

El rubio le sonrio rojo cuando llego al frente suyo

Mientras el padre empezaba su discurso, Hitoshi miro a Neito y puso sus manos sobre las del rubio

Ninguno se caso por amor. Pero eso seguro cambiaria con el pasar del tiempo