Momentos Shinmono

Sostengo Tu Mano

-La fiesta esta haya dentro

Dijo Hitoshi entrando al jardin de la gran mansión, en la que se daba una gran fiesta dentro

Neito miro sobre su hombro sin voltear del todo mientras acariciaba con delicadeza una de las flores que adornaban el jardin

-Lo sé

-¿Emtonces? ¿Fue el ruido?

-No

Hitoshi suspiro, pudo ver desde adentro como Neito a pesar de saber actuar como un maldito dios, realmente en sus ojos se notaba bastante lo aburrido que estaba, la unica razón por la cual Hitoshi juraba que el rubio aun no tomaba sus llaves del auto y se iba, era por sus amigos

-La noche es fria

Señalo el traje poco caluroso que tenia el rubio

-No tengo frio

-Inusual

Bastante teniendo en cuenta lo friolento que es Neito

Hitoshi se acerco a uno de los arbustos y de el arranco con sutilesa una flor pequeña que aun parecia un capullo

-Ten

Hitoshi camino a paso tranquilo hasta el rubio, quién se dio la vuelta para mirarlo

Hitoshi extendio su mano para que Neito sujetara la flor

El rubio hizo exactamente eso, pero no alcanzo a siquiera rozarla cuando el peli morado la dejo caer y aprobecho la sorpresa del rubio, para sujetarlo de la muñaca y jalarlo hasta el para sujetar su cintura

Neito no tardo mucho en saber en que posición estaban, y aunque sus mejillas ya estaban rojas por el frio, estas se hicierón un poco mas rojas, a lavez que su sonrisa crecia

-Si querias bailar conmigo lo hubieras dicho

-Te hubieras hecho el dificil

-¿Y eso es malo?

-No, pero hoy no quiero discutir

Ambos empezarón a bailar suabemente con la musica de la fiesta apenas filtrandose del interior de la casa, dejando que el ruido natural de lo grillos fuera mucho mas alto. Las luces de colores simplemente no pasaban por las ventanas a pesar de estar abiertas, hacique el mayor ambiente era iluminado por una lampara anaranjada que apenas iluminaba el jardin desde donde estaban, ademas de que las luciernagas viajaban de un lado a otro a su alrededor, iluminando lo suficiente su noche oscura y fria

Se valancearón juntos reteniendo el poco calor que suspiraban sus cuerpos, nunca apartando la mirada del otro, dejando al descubierto sus almas, sin filtros, sin mascaras, nada, solo dejandose llevar por una vez

-¡¿Hitoshi?!

El grito de Denki preocupado por su amigo, rezono en todo el patio espantando a las luciernagas y callando a los grillos, y probocando que ambos chicos se separaran de inmediato

Mientras Denki volvia a gritar el nombre del más alto, Neito sintio un peso calido sobre sus hombros, notando de inmediato que era el saco que Hitoshi portaba unos segundos atras

-No te resfries

Fue lo ultimo que dijo mientras iba a buscar a Denki para que este no se perdiera (De nuevo)

Neito sonrio acomodando el saco sobre sus hombros para dar vuelta y seguir caminando por el jardin. Seguramente Kendo lo iria a buscar cuando fuera hora de irse

______________________________________________

Se esta acabando esta historia, en dos capitulos más