ABRIDORES

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Bueno, vamos a hablar de algo que realmente cuesta hacer entender a las personas, los abridores. ¿Por qué cuesta este tema? Porque normalmente este tema se evita, ya que siempre que se intenta explicar en la realidad, resulta difícil hacer creer que se pueda hacer o que funcione. ¿Por qué? Porque la mayoría tiene miedo al rechazo y/o vergüenza, temas que ya hemos abordado en otros capítulos. Por eso, dejé este tema para un capitulo del libro.

Hoy hablaremos de los "abridores", cuál es el mejor y la mejor forma de iniciar una conversación, cuál es la forma más genuina.

Muchos me preguntan "¿qué abridor usas?" (claramente no de esa manera, pero algo similar) y es una pregunta demasiado difícil de responder porque literalmente recuerdo apenas un 1% de mis abridores, y fue porque ocurrió algo interesante o algo que tuviera que recordar por algún motivo chistoso, serio o incluso para mejorar en el futuro, claro está.

El hecho de que el abridor tenga importancia es algo que puede suceder, pero al principio. Es decir, está bien darle importancia al principio a cómo funcionan los abridores, qué forma usar para abrir, pero a medida que le vas agarrando la mano y ganando confianza, no necesitas ningún tipo de técnica o guion para abrir (más allá de los lenguajes corporales). Lo esencial es ver la imagen completa, que consiste en dos cosas. Tienes que aprender a ser congruente, no importa lo que estés sintiendo, si estás contento/triste, pero si al momento de abrir eres capaz de comunicarlo de forma congruente, siempre podrás comunicarte con la otra persona, es decir, puedes abrir estando triste (aunque no es la idea).

Existe un problema muy común en las personas, que es generar un sentimiento falso. ¿Nunca les pasó ver a un amigo sonreír cuando en realidad por dentro no sonríe? Se ve muy seguido y se lee ese sentimiento a menudo. Por ende, si van a hacer un abridor, háganlo con un sentimiento genuino, sin fingir otro.

Está bien ser tímido o estar nervioso, si lo demuestran, incluso podrían usarlo a su favor, pero es mejor siempre ir con la verdad y ser sincero.

Una vez, cuando iba a hablar con una chica (yo era nuevo en estos temas), me pasó que me puse algo nervioso, mis palabras se mezclaron y no tuve mejor idea que decir "ves? ya estando a tu lado me puse nervioso, ¿qué será de nosotros si estamos desnudos?". Una parte de mí pensó "listo, te cachetea y se va", pero al contrario, se rió y dijo "deberíamos ver cómo te pones en esa situación".

A veces, cuando me sentía medio "bajoneado" y quería abrirme con alguien, me ponía a saltar, a motivarme, a cambiar mi cara, mi carácter y actitud para hacer un abridor bueno y no ir solo con mi 1%.

Por un lado, puedes cambiar tu estado, tu energía y abrir de una manera más diferente, o por otro lado, puedes aceptarlo y decir: "estoy tranquilo", "estoy bajoneado" o cualquier otro sentimiento, y comunicarlo de forma congruente, ya que ser congruentes es importante para demostrar lo que sentimos.

Uno de los puntos que también es muy importante es intentar, poco a poco, empezar a ser más creativos/elocuentes, y hay un montón de ejercicios que puedes hacer en tu casa o simplemente hablando con tus amigos.

¿De qué sirve esto? Para no caer en lo que las personas típicamente escuchan, es decir, ser originales, menos "básicos". Porque tienes que entender que cada vez que tú le digas una frase de entrada (abridor) a una persona (especialmente a una mujer) que esté acostumbrada a escuchar, te tomará como uno más del montón. Tienes que ser original y único, o al menos ofrecer algo no tan típicamente escuchado/visto, ya que, de lo contrario, perderás puntos.

Al empezar a mejorar tu creatividad, evitarás caer en ese tipo de trampas, que automáticamente te empiezan a restar puntos.

La verdadera pregunta aquí es: ¿cómo podemos ser más creativos? ¿No? Yo les digo que sean, que es mejor, etc., pero no les enseño. ¿Qué vivo, no? Jaja. Lo primero que tienes que entender es que cada vez que ves algo, debes usarlo a tu favor y dejar volar tu imaginación. Presta atención a lo que ves, y si además eres capaz de escuchar sonidos, de sentir, de oler, y de complementar todos los sentidos, tendrás un sin número de formas de abrir al punto de que se te ocurrirán tantas cosas que empezarás a dudar cuál es la mejor. Pero no te quedes ahí, no te tomes el tiempo de pensar cuál es la mejor opción. Toma la primera que se te ocurra y llévala, no te quedes paralizado esperando y dudando, ya que eso mataría tu tiempo. Lo digo porque me pasaba muy seguido: el nivel de estrés empezaba a subir, las dudas y el miedo de cuál es el mejor o cuál simplemente sirve para tener un buen abridor.

Claramente, lo más importante es lo que viene después, pero el abridor es la clave para marcar un antes y un después en la charla.

¿Qué abridor recuerdas haber hecho y cómo te fue? Leo tu comentario.

¡Espero que hayas disfrutado de este capítulo y no olvides darle una estrellita!

La seducción: El juegoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora