Capítulo 27

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—¿Entonces cuánto tiempo te quedas? —Dahyun me pregunta mientras le da un gran sorbo a su café, decidí hablar con Momo de todo lo que está sucediendo, y bueno, estaba con Dahyun, así que me decidí por invitarlas a las dos, aunque aún es extraño para mí tener esta clase de conversación teniendo tan poco tiempo de conocidas.

—Nayeon me dice que un año o dos —contesto con simpleza mientras deslizo mis dedos por el borde de la taza.

—Es que no entiendo, Jeongyeonnie, todo esto es muy confuso, jalados de los pelos, de chiflados, como quieras decirle —Momo aún no cree que me quede a vivir un tiempo en el país y menos de esta forma, si ellas no me creen imaginen como estoy, sigo en proceso de asimilar como mi vida dio un giro de 180 grados.

—Lo sé... que te puedo decir, el viejo sigue haciendo de las suyas aun después de muerto —Contesto fastidiada, no entiendo cómo pudo hacerme esto, qué manía de querer controlarlo todo.

—¿Y el trabajo en París? —Dahyun pregunta por la vida que estoy dejando atrás.

—Eso fue lo único fácil a decir verdad... Mina se encargará de dirigir el estudio, y bueno, no pienso dejar de tomar fotos, solo que ahora debo equilibrarlo con toda esta locura que mi padre muy amablemente me metió —Me duele pensar que debo dejar todo botado, voy a extrañarla mucho y a Tzuyu, incluso a Daniel.

—¿Cómo lo tomó tu familia? —Momo coloca su mano sobre la mía llamando mi atención.

—Bueno, eso...

Flashback

—Sé que no me van a entender, sé que voy a decepcionar a más de uno, y finalmente sé que los voy a colocar en una situación incómoda, pero es mi última voluntad, confío en que sabrán respetarla... —Nayeon toma aire antes de proseguir, ve detenidamente a cada uno de los presentes, todos estamos expectantes, esas palabras iniciales no son un buen augurio, sé cómo era mi padre, cuando algo se le metía a la cabeza no había poder humano para hacerlo cambiar de opinión. 

》—Sunmi, sé que nuestro divorcio no fue el más equitativo ni el más justo, nunca debí someterte a firmar capitulaciones, nadie en el mundo me amó como tú y sé que el dinero no refleja en ningún momento el amor que sentí por ti, pero quiero irme tranquilo sabiendo que no tendrás preocupaciones de dinero, por ese motivo te dejo el 30% de mis bienes —Nayeon hace una pausa, mi madre tiene los ojos cristalinos, la verdad todos parecemos estar de acuerdo y eso en nosotros es un acontecimiento.

》 —El restante de mis bienes quedarán repartidos de la siguiente forma: Jeongyeon con el 50% de ellos, Hoseok y Seungyeon con un 10% cada uno, mi abogada la Licenciada Im procederá a su repartición siguiendo mis explícitas indicaciones.

Empiezo a reír como loca, mis carcajadas se escuchan por toda la oficina, Nayeon me ve con el ceño fruncido y ellos, bueno, mi madre me ve preocupada por mi salud mental, Seungyeon no parece mostrar ninguna emoción y él...  Hoseok se ve dolido por la decisión de papá, en serio, ¿esto es real?, el viejo me está dejando la mitad de sus bienes, ¡demonios! eso es mucho dinero, ahora soy una maldita millonaria y solo puedo reírme, Nayeon carraspea su garganta intentando llamar mi atención y que logre calmarme, le hago señas que prosiga mientras tomo agua incesantemente para tranquilizarme, ella retoma la lectura del testamento.  

》—Hobi, eres mi hijo mayor y quiero que sepas que siempre te voy amar, pero nunca estuve de acuerdo con las decisiones que has tomado últimamente, no puedo permitir que sigas así, hijo, no vas por buen camino, no quiero mis errores reflejados en ti, quiero que por favor comprendas mi decisión.... Seungyeon hija, te amo y lo sabes, de los tres eres a la que más se lo hice saber y por eso sé que lo vas a entender —Todos en la sala estamos en shock, en serio ¿esto está sucediendo?, paso repetidamente las yemas de mis dedos por mis cejas con la vista perdida 

La promesa || 2Yeon +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora