[ Antes de que Teresa llegara al Área, Emma fue la primera chica allí y sola tuvo que convivir con varios chicos sin la ayuda de ninguna presencia femenina. Y sin darse cuenta provoco que dos chicos se enamorasen de ella causando varios conflictos a...
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Emma estaba organizando las medicinas en la enfermería cuando Chuck llegó, entrando a la cabaña con aire nervioso. —¿Otra astilla?— bromeó Emma, divertida.
Chuck la miró apenado, pero ella le sonrió para que no se sintiera avergonzado. —Ven, pasa— le invitó amablemente.
El chico entró y se sentó, mientras Emma tomaba una pinza para quitarle la astilla. Aprovechando el momento, Chuck trató de entablar conversación. —¿Y qué te pareció el chico nuevo?— preguntó, buscando hablar de algo que no fuera su dolor.
—Pues acaba de llegar, pero creo que me agrada— respondió Emma, tranquila, mientras sacaba la astilla, lo que hizo que Chuck hiciera una pequeña mueca de dolor.
—¿Ya lo conociste?— le preguntó mientras le ponía una curita.
Chuck negó con la cabeza. —Aún no, tal vez hable con él después de que Alby termine de darle el recorrido.
Emma asintió. —Listo— dijo, una vez terminó de atenderlo.
Chuck se levantó y le sonrió agradecido. —Gracias.
Emma le devolvió la sonrisa, y Chuck salió. Ella se quedó un poco aburrida, por lo que decidió salir a caminar un rato. Al salir, vio a Chuck a lo lejos, y se acercó a él.
Ambos se saludaron y caminaron juntos. A lo lejos, Emma vio que Alby le mostraba el Área a Thomas, y Chuck notó que el chico nuevo la miraba.
—El novato te está mirando— susurró Chuck a Emma.
Emma buscó con la mirada a Thomas, y lo vio observándola, tal como le había dicho Chuck. Se sintió confundida. —¿Y por qué lo hace?— preguntó.
Chuck sonrió con diversión. —Es obvio, le llamas la atención por ser la única chica por aquí.
En ese momento, Newt llegó junto a ellos. —Hola, chicos. Chuck, ¿Podrías mostrarle al novato dónde debe dormir? Son órdenes de Alby— le pidió Newt amablemente.
—Claro, no hay problema— respondió Chuck, sin dudar.
—Ahora regreso— dijo Chuck, y se acercó a Thomas, mientras Emma decidió regresar a la enfermería para seguir organizando las medicinas.
Newt la miró y, segundos después, se atrevió a preguntar. —¿A dónde vas?
Emma lo miró algo aburrida. —A la enfermería a organizar las medicinas, ¿Por qué?
Newt la miró nervioso. —¿Necesitas ayuda?
Emma lo miró sorprendida por su oferta. —¿No estás ocupado?
Newt le sonrió. —No, no para ti.
Sin decir más, comenzó a caminar junto a ella, dispuesto a ayudarla. Emma le sonrió agradecida. Mientras tanto, Chuck guiaba a Thomas hacia la zona de descanso, donde las hamacas estaban disponibles para todos.
