Villana, Te Mimaré [GL]

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Capítulo 23 - La golpeé (12)

Los dos bajaron cogidos de la mano y toda la sala se quedó en silencio durante medio minuto. Lin Siya estaba deslumbrante y radiante, mientras que Ah Xin parecía elegante y serena. El contraste de sus trajes en blanco y negro era tan deslumbrante que nadie quería apartar la mirada ni un segundo. Si la sonrisa de Lin Siya podía cegarles, la tenue sonrisa de Ah Xin les rozaba como una brisa primaveral, calmando la tensión y la inquietud de sus corazones.

Sus preciosos vestidos a medida de alta gama y sus exquisitas joyas palidecían en comparación con aquellos trajes de mujer blancos y negros. Su elegancia no necesitaba extravagancias para adornarla.

"Ah Xin, todas te están mirando", le susurró Lin Siya a Ah Xin, sus palabras destilaban celos. "Ojalá no hubieras venido. ¿Qué sentido tiene cambiar de aspecto? ¿Es que esa gente de ahí abajo no puede apartar los ojos y pensar en acompañar a sus compañeras?".

Pero de repente se dio cuenta de que las mujeres vestidas de punta en blanco se ruborizaban y miraban asombradas en su dirección. Se sintió desgraciada; esas zorras seductoras no perdonaban ni a las mujeres.

Ah Xin sonrió débilmente y dijo en voz baja: "También están mirando a Siya".

"Pero te miran más a ti, Ah Xin", estas zorras eran de todo menos sutiles en sus miradas, más directas que los hombres podridos. Quería acercarse y darles una bofetada a cada una para mandarlas a volar.

"¿Qué le ha pasado a Xiaoyu?"

La voz de Ah Xin despertó a Li Xiaoyu de su asombro. Miró a Ah Xin y a Lin Siya y, cuanto más miraba, más raro le parecía algo. ¿Por qué ambas tenían un aura de reina? Ahora que lo pensaba, cuando Lin Siya trabajaba hasta tarde, Ah Xin le preparaba personalmente la sopa y se la llevaba. Cuando Lin Siya se encontraba en una situación difícil con un cliente, Ah Xin traía a toda la empresa para apoyarla.

Y... la existencia de Farmacéuticas Huan Yuan. No lo había entendido antes, pero ahora que recordaba que la familia Gu también estaba en la industria farmacéutica, su corazón latía con fuerza. ¡Dios mío, esto es un plan dominante de Ah Xin para ayudar a su esposa a vengarse!

"¿Xiaoyu?"

Li Xiaoyu se aclaró la garganta. Aunque no estaba tan enfadada como antes, este asunto no podía quedarse ahí. Ella era una persona limpia y recta, nunca involucrada en asuntos de terceros. Sin embargo, había sido acusada injustamente por una niña. Si un adulto hubiera dicho eso de ella, quizá no se habría enfadado tanto, pero al tratarse de un niño, mucha gente podría pensar que era una tercera persona.

Contó lo que acababa de ocurrir y, a medida que hablaba, se enfadaba más. "En cualquier caso, necesito que el señor Gu me dé una explicación".

El ceño de Gu Yan no se había relajado, y Jian Jia, que había vuelto en sí, tiró de Gu Rui en sus brazos para protegerle. Parecía como si temiera que algo le hiciera daño. Tiró suavemente de la manga de Gu Yan y, cuando éste se volvió para ver la expresión preocupada de Jian Jia, le cogió la mano y le susurró: "Jia Jia, no tengas miedo. Conmigo aquí, nadie os intimidará a ti y a nuestro hijo".

Los que conocían la causa y el efecto de la situación se quedaron perplejos al oír las palabras de Gu Yan. Estaba claro que era el hijo del señor Gu quien la había acusado falsamente, pero lo hizo sonar como si ella estuviera causando problemas intencionadamente.

Li Xiaoyu no pudo evitar reírse. Se reía porque no podía creerlo; era demasiado ridículo. "Señor Gu, ¿está sugiriendo que le estoy causando problemas?".

Gu Yan no prestó atención a Li Xiaoyu y en su lugar dirigió una mirada fría y severa a Lin Siya. Lin Siya levantó la barbilla, preguntándose qué estaba mirando el arrogante hombre.