Satoru no ama a su marido. Se repite eso todos los días. No lo ama y nunca lo hará.
Yuuji sufre las consecuencias.
◇ Los personajes no me pertenecen, son creación de Gege Akutami.
En este capítulo sabrás la razón del título de esta historia.
The First Snowfall llegó a más de 100.000 palabras!
Lamento mucha la espera, estuve con muchas cosas este último tiempo.
Nota: te recomiendo leer este capítulo en Ao3, ya que he dejado enlaces que te llevan a imágenes a medida que vas leyendo. (En caso de seguir por acá, dejaré las imágenes a final).
Hay harta información en este capítulo pero he dejado su explicación en cada una de ellas. El libro de la familia Lan, como concepto, no existe en Mo Dao Zu Shi, pero si dejaré varias menciones de esa historia, ya que he sacado un par de cosas de ahí para escribir esta parte. No debería contener spoilers explícitos pero si bastantes datos. Pero en caso de requerirlo, te dejaré una advertencia destacada.
Aparecerán tres personajes pero su participación solo será en este capítulo y será algo breve.
Por último, hay advertencia de contenido pero están enumeradas en las notas finales.
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Satoru no asistió al funeral de Okkotsu.
No podía. No se sentía digno de darle un último adiós y nadie se lo recriminó o se lo dijo de frente. Sabe que la mayoría de los hechiceros fueron a Sendai para despedirlo, pero él se quedó atrás.
Ahora Okkotsu reposa junto al lugar de descanso de Yuuji. Lian-san no fue capaz se separarlos, por eso se hicieron los arreglos para que pudiera permanecer bajo la familia Itadori.
Los hermanos Fushiguro y Shoko eran las únicas personas que siguieron siendo una constante en sus días. Incluso cuando él solo quería estar solo. Se volvió más introvertido y silencioso al pasar de los días. También más duro y crítico consigo mismo, en especial con la única petición que Yuuji le había pedido: Proteger a Okkotsu. Y él había fallado.
Pensaba que casi toda su vida se trataba de fallos. Suguru había sigo el primer desastre de su corazón. La primera ceguera a lo que por años estuvo dando indicios de que algo andaba mal y no había aprendido nada, absolutamente nada al respecto después de que Suguru desertó.
Las cosas pudieron haber sido diferentes con Yuuji. Sabía que él lo amaba, que su amor era genuino y puro, que esperaba que Satoru pudiera corresponder a esos sentimientos en algún momento pero él tenía miedo y actuó en consecuencia a su pasado.
