BAJI Y TU

AIRE LIBRE

La noche ya estaba llegando y ya nadie estaba por alrededor, Todos ya se habían ido a casa y dado el calor del tan esperado beso entre ambos, las cosas se calentaron mas de lo que pensaron.

BAJI: no puedo con tanta provocación de tu parte mi amor... el sentirte así, me calienta mucho.

Entiéndeme, ha pasado mucho tiempo desde que estuvimos por última vez juntos... y se me hace muy excitante ahora que paso el tiempo, discúlpame... pero, no me voy a frenar por estar aquí al aire libre |sonríe|

...

Está siendo una noche muy fría, pero algo me dice que no será por mucho tiempo.

Se adentran un poco entre los árboles que están alrededor del santuario, buscando un lugar cómodo para seguir con su reconciliación que aún estaba pendiente.

El frio no sería impedimento para que se amaran esa noche, llegan a un buen lugar, mientras los besos comenzaban una vez mas a recorrer sus cuerpos. La luz de la luna que podía reflejar un poco entremedio de las hojas de los árboles iluminaba sus cuerpos que poco a poco se desprendían de la ropa.

BAJ: |entre besos| - mi amor~... ¿crees que deberíamos habernos ido a tu casa o algún otro lugar? – es que yo no creo aguantar llegar a ningún otro lado con las ganas que te tengo...

Extrañaba tanto estar así contigo, extrañaba tus besos, tu cuerpo y su reacción cuando estás en mis brazos mi amor...

Justamente así me encanta, que tu piel reaccione a cada toque que le doy... mi cuerpo extrañaba mucho al tuyo~

Sus torsos desnudos, frotándose el uno al otro, mientras sus besos seguían con cada vez mas pasión.

Te recarga contra un árbol, sus manos recorren cada parte de ti. Sus manos masajean tus pechos, mete uno de ellos en su boca, lamiéndolo y chupándolo. Tu por otro lado tocas y jalas su largo cabello.

BAJI: | con voz dulce| - oye, oye... si sigues jalándome el cabello así, vas a terminar quitándome el mechón...

|mete sus dedos en tu intimidad| - ah~, mi amor, que mojada estás... me encanta que te calientes al estar conmigo, lo amo~

Mueve sus dedos dentro de ti, cosa que te calienta aún más. Baja tus pantalones. Sacando una de tus piernas, abre tus piernas y la levanta, mientras lame tu intimidad.

BAJI: que rica estas mi amor... mhn~ - definitivamente tú eres mi comida favorita~

...

Gime más mi amor, me encanta que lo hagas... no hay nadie cerca, así que puedes hacerlo con confianza, anda gime ... gime mi nombre y pídeme que te haga mía aquí...

Mientras te dice eso desabrocha su pantalón y lo baja un poco, sacando su evidente erección rosando un poco tu intimidad con ella.

BAJI: no quiero arruinar el momento y menos ahora que estamos a punto de hacerlo, pero necesitaba que supieras que no tengo protección hoy. No es como que me imaginara que esto pasaría... y pues, no soy de los que mantienen condones por precaución discúlpame...

No se si quieres que lo hagamos de todos modos o ya mejor nos vamos a casa y de camino compro unos.

Le dices que tienes unos en la cartera. Tu siempre andabas con algunos por precaución desde que sales con él (le aclaras) – sabias que ambos eran muy pasionales y preferías siempre tener a la mano una caja contigo.