El brillo en la pantalla de su celular le quitó el aliento. Miro solo de reojo pero su mano instintivamente agarró el celular y con solo leer el nombre sabía que algo iba a pasar.
>>¿Dónde estás?
Leer el nombre de Oikawa no era lo que más deseaba en ese momento, pero luego de quedarse viendo la pantalla por varios segundos terminó por contestarle.
¿Qué necesita? Oikawa-san<<
Envío el mensaje y tiró el celular al otro lado de la cama, ¿Por qué siempre tenía que ser tan formal con él? Le daba cosas. Pero luego se sintió mal por haber tirado su celular. Suspiró volviéndolo a agarrar pero en cuanto escuchó la notificación timbrar lo volvió a soltar al piso.
―Mierda ―dijo recogiéndolo nuevamente.
>>Ven a la plaza para almorzar
>>Apúrate
Los dos mensajes lo dejaron pensando, además ¿Por qué debía apurarlo siempre? Se levantó de mala gana y antes de salir con su mochila se dio cuenta que solo iba a hacerle bulto.
Cogió su llave y salió con lo que tenía a la mano, su celular. Bajo los casi mil escalones que tenía por delante y sí, estaba demorando más de la cuenta pero en cuanto salió solo se concentró en tener ambas manos en sus bolsillos porque el viento amenazaba con congelarlo en cualquier momento.
No estaba tan lejos de la plaza y se dio cuenta que se estaba acercando cuando vio la cantidad de personas a su alrededor. Para ser mediodía el cielo estaba gris con el frío latente, no se quería ni imaginar lo que iba a sufrir esa noche. Detuvo sus pasos cuando se dio cuenta que estaba justo en el medio del lugar, pero no entendía como Oikawa suponía encontrarlo en todo ese tumulto, sacó su móvil buscando algún mensaje pendiente pero se detuvo tan pronto vio unos zapatos delante de él.
―Oikawa..―salió instintivamente de sus labios. Se veía diferente a como había llegado, ahora llevaba unos lentes y un saco marrón, su piel estaba más pálida por el frío y sus orejas estaban rojas.
―Tobio-chan ―le saludo con el típico tonito de siempre― ¿Por qué tardaste tanto? ¿A qué hora crees que vamos a comer?
―Yo no pensé que comeríamos juntos la verdad
Oikawa se volteó para empezar a caminar, podía escuchar sus excusas mientras andaban. Se detuvo tan pronto vio la cantidad de puestos alineados en medio de la pista volviendo totalmente obsoleta la carretera.
―¿Qué es eso?―preguntó Kageyama haciendo que el otro volteara a mirarlo
―Es donde vamos a almorzar―dijo con cierto ánimo― ¿No te importa que paguemos mitad mitad no?
Kageyama se quedó en silencio unos segundos, no estaba de acuerdo.
―¿Por qué? ―lo cuestionó logrando que oikawa frunciera levemente el ceño― O sea no entiendo, no creo que este muy caro.
―No te he traído aquí por la puras ―dijo acercándose a los puestos de comida que estaban repletos de gente― Mira.
Tomó a Kageyama por los hombros para que mirara en la misma dirección que él y solo cuando leyó con rapidez el cartel entendió porque lo había traído con él.
"Dos x Uno en todas las comidas solo por hoy!"
―Oikawa-san ―el ojiazul se quedó sin palabras.
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Destinados a Conectar
FanfictionQue harias si quien creiste que era el amor de tu vida, no es la persona con la que estas destinado a estar. Inicio 18/12/23