Ma chérie / Mon Ami ~~ Gambito x Rogue

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~~Arco intermedio~~

Rogue se coló por el pasillo del complejo Amigos de la Humanidad. Eran un grupo radical antimutante altamente organizado que había aparecido recientemente. Operaban al margen de la ley, pero ciertas agencias gubernamentales no estaban muy interesadas en rastrearlos y detener sus actividades. Eso significó que los X-Men tuvieron que hacer el trabajo sucio una vez más.

Parecía que justo cuando habían salvado el mundo y finalmente tendrían la oportunidad de relajarse, algo más surgiría. Ayudó que tuvieran al profesor guiándolos desde el futuro y que todo el equipo volviera a estar unido. Nadie dijo jamás que ser un X-Men fuera fácil.

Esta misión en particular la tenía nerviosa. Ni siquiera era una misión autorizada, ella acababa de ver a Graydon Creed, el líder, y lo siguió. Ella había intentado pedir refuerzos cuando él la llevó a su base, pero algo había codificado las señales de radio. Por supuesto, podría volver con su equipo, pero eso llevaría demasiado tiempo. Si pudiera colarse allí y conseguir una lista de miembros o algo así. Entonces podría llevárselo a Logan.

Probablemente le daría un sermón sobre eso, pero a ella no le importaba. Esta era una oportunidad única y él habría hecho lo mismo que ella estaba haciendo ahora.

El sonido de voces a la vuelta de la esquina llamó su atención y buscó un lugar donde esconderse. Excepto que todas las puertas con las que se había topado en este salón en particular estaban ocupadas o cerradas con llave.

Ella jadeó en estado de shock cuando una mano se cerró alrededor de su boca y una segunda alrededor de su cintura, no había escuchado a nadie acercarse detrás de ella. Las manos sin cuerpo la llevaron a una habitación oscura y cerraron la puerta. Ella se retorció en el agarre de la persona pero él no cedería. La empujó hacia el interior de la habitación y ella oyó un silbido, como un sistema hidráulico en una puerta.

Mientras luchaba contra su captor, hizo un balance de su entorno. Parecía como si estuviera en una especie de sala de control de seguridad con grandes consolas de computadora y pantallas gigantes que mostraban diferentes partes de la base. Sin embargo, la vista se interrumpió cuando la empujaron dentro de un gabinete alto y delgado, con su captor justo detrás de ella.

Ella le lanzó el codo hacia el estómago. Rogue tragó un grito de dolor cuando su codo conectó con lo que parecía una armadura. Ella no había visto a ninguno de los Amigos usar chalecos antibalas antes. Su trato habitual era antagonizar a los mutantes para que usaran su poder para lastimarlos mientras lo filmaban. Les gustaba vender las imágenes a las estaciones de noticias para que el público pudiera ver lo peligrosos que eran los mutantes.

Sin embargo, los X-Men habían descubierto recientemente que habían estado capturando mutantes débiles. Pero todavía no sabían por qué se los llevaban.

"Estás demasiado tensa, Cherie". La suave voz de su enemigo mortal le susurró al oído.

La última vez que había visto esta mala vida fue en un bar de la ciudad de Nueva York. Se detuvo para pedir direcciones cuando esa Rata del Pantano se acercó detrás de ella y puso su mano justo en su trasero. Rogue había cumplido su promesa en ese mismo momento. Con la velocidad del propio Quicksilver, ella le dio una fuerte patada en las espinillas y salió furiosa de la barra. Ni siquiera le había importado haberse olvidado de preguntar direcciones.

Habían pasado meses antes de que esos sueños eróticos suyos se detuvieran e incluso ahora, casi un año después, ella todavía los tenía. La enfureció muchísimo.

"Te dejaré ir si prometes no gritar". Susurró de nuevo provocando que un delicioso calor en su estómago se dirigiera hacia el sur. "O patearme".