Cuando al fin se dejaron de escuchar los cánticos la gente salió de sus escondites, algunos con caras de miedo, otros con caras angustiadas, y otros totalmente desinteresados de la situacion, aun asi el murmullo estaba en el aire Todo el mundo tenia algo para opinar sobre lo que hace minutos atrás había pasado.
Pero a Charlie no le importo nada, este salto por la ventana cuando tuvo la oportunidad.
No demoró nada en llegar a su casa, cerró la puerta de golpe y entró con el corazon alterado, no se acordaba de el espejo en la sala y se sorprendió al verse tan alterado, su pelo rubio y corto estaba totalmente despeinado y sudoroso, sus ojos marrones se veían desorbitados y rojos de aguantar lágrimas.
Su pantalon crema estaba manchado con tierra por estar agachado y la camisa verde se veia arrugada,sucia y con gotitas de lagrimas.
Se quedó contemplando su reflejo en el espejo hasta que los golpes de las olas se sentían demasiado fuerte afuera de su casa.
Charlie se sentó en su escritorio donde descansaba una hoja en blanco y un lápiz con punta afilada.
Agarro el lápiz y totalmente perdido en sus pensamientos empezó a escribir lo que sintió en palabras sueltas. El oceano que rugía más con cada palabra de charlie mas de hermoso cauasaba mas panico a el joven, hasta que recordó lo que dijo la señora que conoció cuando llegó y lo que rebeca dijo cuando lo vio por primera vez a charlie, pero ¿Que se supone que significaba todo eso?
¨me voy a dormir no soporto mas nada¨ pensó charlie y cayó rendido a la cama.
Cuando se acostó pensó ver un pequeño movimiento en su ventana pero le gano el cansancio al acostarse.
En su sueño,él repetía lo que había pasado una y otra vez, pero esta vez, la persona que corría desesperada no era un niño sino Rebecca, él no podía moverse por más que lo intentara se sentía petrificado en el suelo, mientras Rebecca gritaba y corría desesperada. De la nada el culto empezó a rodear a Rebecca, ella se dejó atrapar por dos de ellos, y se la llevaron mientras la pelirroja miraba a Charlie con atención, aunque el joven hacía fuerza para moverse no pasaba nada, a Rebecca se la llevaban al oceano, llegaron a la orilla del oceano y hicieron que caminara hasta hundirse, Charlie gritaba
desesperado y se intentaba mover, cuando ya no se vio nada de la pelirroja la marea subió de golpe, y inundó todo el pueblo.
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La Costa De Las Sombras
FantasiaEn un tranquilo pueblo costero, donde las olas esconden secretos antiguos, Charlie llega en busca de inspiración para sus historias. Pronto descubre que este lugar aparentemente hermoso oculta un oscuro culto que venera al mar como una deidad. Atrap...