Zero no Tsukaima: Railgun no Rondo II

Ascenso

Decir que estaba enojada con la reina Henrietta era poco, con su especial carácter Mikoto sabe que si la tuviera enfrente ya le hubiera dicho por lo menos un par de cosas que no se le podrían decir a un monarca.

Después de todo tras arriesgar la vida de Louise por una misión prácticamente suicida era imperdonable, ahora ambos países en guerra habían decidido una tregua para celebrar el Pentecostés de plata, no es que se quejara de que la batalla se detuviera, después de todo los aldeanos de este pueblo que fueron abandonados por su propio ejército ahora celebran junto a los soldados de Tristain quienes compartieron su alimento al ver que el gobierno de Albion los habia abandonado.

Sin embargo la simple y absurda definición que parecían tener estos gobernantes de diplomacia le revolvía el estómago, lo peor de todo es que en su mundo y sobre todo en Ciudad Academia esto era igual o incluso peor.

- Ahora que lo pienso, creo que hay una festividad parecida en ciudad academia...

Dijo la chica solo para ser interrumpida por las sonoras quejas de Louise.

- ¿Es qué la gente de Gotha del Sur no tiene ni tantito orgullo? Incluso nos dieron la bienvenida y todo.

Mikoto sintió una gota de sudor caer de su frente.

- ¿No crees que es algo natural? El ejército de Albion los abandonó, y los soldados de Tristain los están ayudando, sin mencionar que el que se hayan detenido las batallas es motivo de alegría.

Está vez fue el turno de Louise de suspirar.

- Bueno ¿Qué puedo esperar de una plebeya que no entiende nada?

Si, definitivamente esto se tornaria en otra pelea, y el enojo que empezaba a brotar de su pecho solo lo confirmaba.

- Pues si ser una pebleya significa disfrutar de la paz y no la guerra entonces me alegro mucho.

Su simple declaración hizo enojar a Louise más de lo que esperaba.

- ¡Bueno entonces ve a disfrutar de tu paz mientras yo voy a ver a la reina!

Louise se dió la vuelta alejanose pisando fuerte.

- ¡Espera un minuto Louise, se le olvida que yo también soy familia...

Se cayó abruptamente al darse cuenta que casi revelaba por error que también era familiar de Henrietta lo que sin duda alguna significaba que la misma era una maga del vacío y eso era que en absoluto se debía saber.

- ¡No vengas! ¡No quiero tener a una mascota persiguiendome!

Diciendo esas palabras Louise dejo atrás a Mikoto quien en ese momento parecía un volcán a punto de hacer erupción, si eso la hizo sentir satisfecha después de todo sabía sobradamente lo mucho que le fastidiaba ese apodo a la castaña desde que la invocó.

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- Louise ¿Y Mikoto?

Cuando llegó a la base principal, la reina le preguntó directamente por la castaña, a lo que Louise no supo responder muy bien.

- Em... He bueno ella está ocupada con unas cosas así que yo llevaré a cabo la misión.

Por un momento le pareció ver un poco decepcionada a la reina.

- Ya veo, esperaba pedirle un favor.

- ¿Favor?

- Verás ayer logramos traer la máquina de Mikoto, Zero ¿Verdad? ¿Acaso aún puede volar?

Louise recordó lo sucedido hasta hace poco en cierta montaña nevada, por lo que realmente dudaba que esa cosa pudiera volar en ese momento.