No quería irme, no así.
Me quedaban tres días para irme de mi pueblo de la infancia.
Mi madre me avisó hace un mes que nos tendríamos que mudar al pueblo donde mi padre vivía antes de su reciente muerte.
Todavía no se lo había contado ni a mis amigos ni a mi novio. Solo a uno de mis mejores amigos, Liam, porque un día me derrumbé de tanto pensar en la puta mudanza en una clase cuando estábamos de guardia y solo le tenía a él.
Liam era mi mejor amigo desde que eramos pequeños. Y nos hicimos amigos el primer día de clase cuando me vio sola frente a la puerta del colegio.
Era un chaval guapo, no nos íbamos a mentir, pero no de mi estilo. Era un chico alto, rubio y ojos color miel. Era muy simpático, y lo llevaba siendo toda la vida. También era muy sociable, y esa era una de las razones por la que nuestro grupo de amigos existía.
Y para poneros un poco en contexto:Mi padre acababa de morir y me tocaba ir a su funeral y quedarme con su herencia ¿el problema? Que en esa herencia va incluida la casa del pueblo donde vivía. Una casa que según mi madre nos ayudaría a saldar todas las deudas que nos quedaban desde que se fue mi padre de casa. Vamos, desde que yo tengo un mínimo de memoria.
Y por todo eso y más, eran las cinco de la mañana y todavía no había cerrado ni un minuto los ojos para ir a clase esa misma mañana.
🌕🌕🌕
Holaa, soy la autora de este nuevo libro.
Estoy un poco nerviosa porque nunca he escrito un libro como tal y no sé si me quedará bien. De hecho, es mi amiga la que me ha pedido que lo suba aquí.
Lo siento mucho si hay faltas de ortografía o si tardo mucho en subir los capítulos.
Dicho esto espero que lo que leáis os guste.
Besoss.
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Un cigarro después de la muerte
Teen Fiction¿Qué harías si llegas nueva a un pueblo repleto de asesinatos? ¿Qué harías si ves que en cada asesinato que sucede encuentran un cigarro entre los labios de la víctima? ¿Qué harías si tu grupo se propone buscar al culpable de todo esto? ¿Qué harías...