— No, no quiero ese mueble ahí, Josuan Emilio —gritó una Sue.— ¿Quién es Emilio? —preguntó Josuan preocupado.
— El chico con el que me voy a ir como no saques ese traste de aquí —UFF, la cosa estaba calentita.
Decidí que era el momento de entrar a intervenir, metí la llave en el cerrojo y abrí la puerta encontrándome con la escena.
Una Sue enojada de brazos cruzados y un Josuan con una ¿Ducati en el salón?
Ahora entendía su enojo, le había costado mucho que la dejarán redecorar todo el apartamento, como para dejar entrar a su chico esa moto
— Hola —dije para desviar la atención de la situación.
— Has vuelto —chilló Sue lanzándose a mí—. Pensé que no llegarías hasta la próxima semana.
— Lo pensé mejor y no me apetece retrasarme con las clases.
— Has llegado en el momento justo —dijo volviendo a poner mala cara—. Mira el horror que quieren meternos en el salón, explícale tú que no nos pega con la decoración.
— En realidad me parece bonita — mencioné guiñándole un ojo a Josuan—. Es una Ducati del 60.
— No sabes la alegría que me da verte —sonreí entendiéndolo—. El día que le pida matrimonio a Sue, te pediré que vengas a vivir con nosotros a nuestra nueva casa porque no sé si pueda sobrevivir solo con ella.
— Sabes que te estoy escuchando —recordó una Sue—. A ver los amamos las motos, ¿dónde van a poner esa cosa? —preguntó lista para poner el grito en el cielo—. Porque una cosa es que les guste y otra que me metan una en casa.
— Debajo de la tele —dije señalando lo obvio.
— ¿Y qué hago con ese mueble? —señalo el sitio.
— Lo quitas —vi todas sus intenciones de quitarlo y ponerlo de adorno en mi cabeza.
— Podemos ponerlo a este lado de la puerta y no habría que quitar ningún mueble —intervino Josuan.
Al final Sue dejo que la moto se quedará. Recuerdo el día que llegamos aquí, era un apartamento decorado por un chico, no estaba mal, pero Sue quería redecorarlo completamente. Estuvo llorándole a su chico casi toda una semana.
♪♪♪
— Pero, ¿Por qué no nos dejas cambiar la decoración? —preguntó un poco cansada, ya de insistir—. Prometo que te gustará, tenemos buen gusto.
— Ahora hablas en plural —dijo su chico viendo sus intenciones.
— Porque a ella también le apetece cambiar todo este sitio —aclaró haciendo que la atención pasará a mí.
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Fuimos Canciones / Somos Canciones
Novela JuvenilAlexander McCasthy parece tenerlo todo en la vida: amigos, éxito con las mujeres y una actitud segura y confiada que lo ha llevado a conseguir todo lo que desea. Sin embargo, todo esto cambia cuando conoce a Amara Grandstaff, una mujer completamente...