Esta página es una difícil confesión de un cambio que necesito hacer en mi vida. He llegado a la conclusión de que debo dejar de escribir para vos, al menos por un tiempo, para poder concentrarme en mi crecimiento personal y en la conexión con los demás.
Nuestra relación ha sido una parte importante de mi vida, y cada palabra que he escrito para vos ha sido un acto de amor y dedicación. Pero, me he dado cuenta de que esta dedicación exclusiva a vos ha comenzado a limitar mi capacidad de explorar otras relaciones y de conectarme más profundamente con las personas que me rodean.
Al dejar de escribir para vos, estoy abriendo espacio en mi corazón para conocer a nuevas personas y experimentar nuevas conexiones. Quiero ser capaz de dar lo mejor de mí mismo a aquellos que me rodean, no solo a vos. Necesito esta oportunidad para crecer como individuo y para aprender a valorar y apreciar las diferentes perspectivas y experiencias que cada persona puede aportar a mi vida.
Espero que puedas entender mi necesidad de tomar este tiempo para mí mismo. Esto no significa que nuestro amor sea menos importante o que no te valore como persona. Al contrario, es porque te valoro profundamente que siento la necesidad de hacer este cambio. Confío en que nuestra relación será lo suficientemente fuerte como para resistir este período de separación y que saldremos más fuertes y más unidos en el otro extremo.
Decidir dejar de escribir en mi diario personal es una decisión que no tomo a la ligera. Durante tiempo, ha sido mi refugio, mi confidente, el lugar donde puedo expresar libremente mis pensamientos más íntimos sin miedo al juicio o la crítica.
He llegado a darme cuenta de que dedicar tanto tiempo a plasmar mis pensamientos en esta aplicación me está impidiendo realmente vivir mi vida. En lugar de experimentar plenamente cada momento, me encuentro constantemente preocupado por documentar cada detalle en mi diario. Esto no solo me está robando la oportunidad de disfrutar plenamente de mis experiencias, sino que también está afectando mi capacidad para concentrarme en mí mismo y en mis propias necesidades.
Al dejar de escribir en mi diario, estoy liberando tiempo y energía para enfocarme en mi propio crecimiento y bienestar. Quiero aprender a escucharme más, a conectarme más profundamente con mis emociones y a dedicar tiempo a actividades que me nutran y me hagan feliz. Es hora de dejar de vivir a través de las páginas de un libro y empezar a vivir verdaderamente en el mundo real.
No estoy diciendo adiós para siempre a mi diario personal. Quién sabe, tal vez algún día vuelva a retomarlo. Pero por ahora, necesito este espacio para mí mismo, para descubrir quién soy más allá de las palabras escritas y para abrazar plenamente la experiencia de estar vivo. Así que aquí estoy, dejando atrás las páginas del pasado para dar paso a un futuro lleno de posibilidades y autodescubrimiento. Es hora de ponerme a mí mismo en primer lugar y empezar a vivir mi vida sin mirar atrás.
Hace pocos días pude diferenciar algo. Logré diferenciar el significado de querer y de amar, cosas que pueden confundirse algo.
Querer es tomar posesión de algo, de alguien. Es buscar en los demás eso que llena las expectativas personales de afecto, de compañía. Querer es hacer nuestro lo que no nos pertenece, es adueñarnos o desear algo para completarnos, porque en algún punto nos reconocemos "carentes". Querer es esperar, es apegarse a las cosas y a las personas desde nuestras necesidades. Entonces, cuando no tenemos reciprocidad hay sufrimiento. Cuando el "bien" querido no nos corresponde, nos sentimos frustrados y decepcionados. Si quiero a alguien, tengo expectativas, espero algo. Si la otra persona no me da lo que espero, sufro. El problema es que hay una mayor probabilidad de que la otra persona tenga otras motivaciones, porque todos somos muy diferentes.
Cada ser humano es un universo. Amar es desear lo mejor para el otro, aún cuando tenga motivaciones muy distintas. Amar es permitir que seas feliz, aún cuando tu camino sea diferente al mío. Es un sentimiento desinteresado que nace en un donarse, es darse por completo desde el corazón. Por esto, el amor nunca será causa de sufrimiento. Amar es darte un lugar en mi corazón para que te quedes como padre, madre, hermana, hija, amiga y saber que en el tuyo hay un lugar para mí. Dar amor no agota el amor, por el contrario, lo aumenta. La manera de devolver tanto amor, es abrir el corazón y dejarse amar.
Por todo esto ahora puedo asegurar que te amo.