The Death Korps de RWBY

XXVI

Hansel inhaló bruscamente y parpadeó, se habría limpiado el sueño de los ojos con el brazo derecho, pero Ruby tenía un agarre demasiado fuerte para que él pudiera moverlo. Con mucho cuidado usó su dedo índice de metal para quitarse el sueño, nuevamente se despertó antes de que el sol saliera en el cielo, contempló volver a dormir pero solo siguió mirando al techo.

Era extraño, su amigo de Armageddon y su… conocido de Vostroya aparecen al mismo tiempo en el mismo mundo que él, aunque puede que no conozca el Tallarn, el hombre en un momento estuvo asociado con su propio regimiento. El propio Tecnosacerdote también se había asociado con Krieg, era la única razón por la que sabría sobre sus mejoras biológicas para la cría de regimientos.

Eh, pensar estaba por encima de él, apuñalar y disparar era su trabajo, así que por defecto es la voluntad del Emperador que aparecieran y eso estaba bien para él.

Ruby acurrucó su cabeza más profundamente en la curva de su cuello, Hansel olió su cabello, disfrutó el dulce olor a fresa de su cabello, que era una de las razones para mantener su rostro desenmascarado.

Ruby se frotó los ojos somnolientos antes de volver a poner su mano en su pecho con una sonrisa somnolienta. Una pequeña sonrisa cruzó el rostro de Hansel, esos pequeños labios eran otra razón por la cual la máscara puede colgar a su lado todo el día si el Emperador lo permite. Sinceramente, no tenía idea de que se estaba perdiendo un lujo tan encantador.

Pero por ahora se iba a volver a dormir, las pruebas físicas que le iban a realizar hoy muy probablemente serán muy extenuantes.

Sin embargo, los gemidos y el sonido de una pata arañando la puerta mantuvieron a Hansel despierto, pero se dio cuenta de que había dejado a Jaeger afuera con la señorita Greenfield.

Se levantó silenciosamente y caminó silenciosamente por el piso alfombrado para abrir la puerta del equipo lentamente, Jaeger asomó la cabeza y comenzó a gemir más fuerte, pero Hansel colocó su mano de metal sobre el hocico de Jaeger y susurró: "¡Shh! ¡Dezent!"

El Krieghund respondió mirando a su amo moviendo la cola con entusiasmo, entrando obedientemente a la habitación con la mano de su amo alrededor de su cuello. Tiró hacia adelante y comenzó a oler los pies de Ruby, retrocediendo un poco antes de sentarse en la alfombra.

Ruby se movió por el olfateo de Jaeger, aturdida, secándose el sueño de los ojos, "Oh, oye chico, ¿dónde has estado?"

Jaeger jadeó con una sonrisa perruna mientras se recostaba justo entre Hansel y Ruby, pero a suficiente distancia de los dos tortolitos para no mantenerlos separados. Se acurrucó formando una gran bola peluda y dejó escapar un suspiro, moviendo la cola mientras su amo le daba palmaditas en la espalda.

"Guten Morgen, mein Rosenrot." Hansel susurró empujándola hacia atrás a su cómoda posición de acurrucarse.

Un suspiro escapó de Ruby, "Hans. O habla normal o enséñame tu segundo idioma porque, aunque me gusta, todavía no entiendo del todo lo que estás diciendo".

Hansel asintió con la nariz en su cabello nuevamente, no podía olvidar lo bien que olía su cabello, arrastró su rostro hasta su mejilla y comenzó a besarla perezosamente, su brazo derecho la acercó mientras su prótesis izquierda la frotaba suavemente. cuero cabelludo, "Du riechst so gut~"

"Hans~" Ruby se rió mientras el Kriegsman comenzaba a subir y bajar por su cuello con sus labios, "estafa, eso hace cosquillas~"

"Entonces, ¿por qué parar?" Preguntó, susurrando en voz baja en su oído.

Ruby luchó juguetonamente con Hansel, colocando sus manos detrás de su cabeza sin ofrecer resistencia, "Porque estoy a cargo de ti hasta que te vayas, incluso entonces ahora soy tu novia, así que harás lo que te diga".