Violet
Espero y espero, ¿Por qué Sam no ha llegado? Hace dos horas me dijo que vendría, me estoy preocupando, espero que no le haya pasado nada malo. Trato de convencerme de que esta bien pero mi mente se pone a pensar otras cosas... "quizá prefirió quedarse más tiempo con Alexa". Cada minuto que pasa me siento más decepcionada, me ha dejado plantada y ya son las 11:30, no creo que vaya a venir. Subo a mi cuarto y me pongo mis audífonos a todo volumen, seleccionó mis canciones favoritas y cierro los ojos. La música es una de mis cosas favoritas en el mundo, cuando estoy mal o triste o feliz me encanta escucharla, es lo que más me alegra el día.
Abro los ojos y me quedo mirando el techo, desconcertada. Volteo a ver mi mi iPod para ver que hora es.
-¿PERO QUE MIERDA?- salto de la cama y salgo corriendo a lavarme la cara y los dientes.
Son las 7:10 entro a las 7:30 a la escuela. Diariamente me despierto a las 6 para bañarme y alistarme bien, no se que me paso, nunca he batallado para levantarme temprano. Pero por una extraña razón hoy no he escuchado la alarma.
Bajo las escaleras deprisa, agarro mi mochila y alcanzo a ver en la sala a mis padres, están con alguien, me asomo para ver mejor y lo que me encuentro es una sorpresa. Están la señora Evans, Sam y Jamie sentados ahí, ¿Por qué están aquí? ¿Pasaría algo? y desde luego Sam no esta esperándome para ir a la escuela, esta suspendido hoy y parte de la próxima semana. Que mas da, en la tarde le preguntare a mi mamá.
Salgo de la casa y camino muy rápido, hoy no voy muy arreglada, llevo un molote, leggins, una blusa sencilla y mis toms. Usualmente no voy arreglada pero hoy me esforcé menos, llego un minuto antes de que cierren la puerta. Alexa me mira con un expresión divertida y luego suelta:
-¿No había agua o que?
-Ja ja, muy graciosa- le digo sarcásticamente. Odio estos comentarios.
-Es broma.
-Ya lo se- me siento y saco mi cuaderno.- ¿ayer saliste con Sam?- finalmente lo digo.
-Em.. Si, hemos ido al parque de diversiones. Pensé que te había contado- me contesto.
-¿Por qué pensaste eso?- la miro pero ella no me esta viendo a mi.
-Dijo que iría a visitarte- lo dice nerviosa, como si estuviera ocultándome algo.
-¿Ah, si? ¿Eso dijo?- la rabia crece cuando recuerdo que me dejo plantada ayer.
-Si.
-Pues nunca llego, lo espere mucho tiempo. ¿Raro, no?- dije, esperando que me diga la verdad.
-Mm si, supongo que si- se centra en su cuaderno y trata de ignorarme.
No le preguntare más acerca de esto pero espero que después me cuente que esta pasando, porque se que paso algo. Instinto femenino.La escuela paso muuuuy lenta, más lenta de lo normal, será porque Sam no ha asistido hoy. Quiero saber que hacia en mi casa en la mañana y porque estaba hablando con mis papás. Llego a la casa con el molote ya casi caído, me siento sucia hoy, me bañare después de comer.
Mi mamá se encuentra en la cocina.
-Hola Violet, ¿Cómo te ha ido?- dice con una sonrisa.
-Bien ¿a ti?- dejo mi mochila en el sillón y me siento en la mesa.
-Bien, tu padre tiene a unos clientes en su oficina y no quiere que lo molestemos.
-Entiendo- digo y subo a mi cuarto.
-Tenemos invitados- me detengo.
-¿Quienes?- bajo las escaleras de nuevo.
-La señora Evans nos pidió cuidar de Sam y de Jamie por una semana, ira a visitar a su padre y no los puede llevar con ella. Le dije que con gusto cuidaríamos de ellos- lo dice con un tono muy feliz.
Mi mejor amigo, el chico que me gusta, Sam... se quedara en mi casa por una semana, siete días, 168 horas, miles de minutos... Aunque me siento feliz me siento muy enojada por lo que paso ayer y no pienso hablarle hasta que se disculpe conmigo.
-No te importa, ¿Verdad?- continua mi madre después de un momento, y me doy cuenta que no le he contestado.
-Me parece bien- digo finalmente. Me examina por un rato y luego vuelve a hacer lo que sea que estaba haciendo.
-La comida estará lista en un rato, tuve que ayudar a tu papá con unas cosas y me he atrasado, te llamare cuando este lista.
-Ok- le contesto y subo por fin a mi cuarto. Me imagino que se quedaran en el cuarto vacío que esta enseguida de mi habitación. Siempre lo usamos para que se hospeden nuestros invitados.
Me meto a mi habitación, alisto ropa para meterme a bañar en lo que esta la comida. Agarro mis toallas y voy camino al baño, paso por el cuarto donde probablemente estén Sam y su hermano, me contengo para no abrir la puerta y saludarlo como siempre. Toco un par de veces en la puerta del baño pero como no escucho nada supongo que no hay nadie, cuando abro la puerta quedo frente a frente con el. No puede ser. Sam.
Lleva solo una toalla en la cadera y deja todo su torso descubierto, trae el cabello mojado y caen gotas por todo su cuerpo, se ve tan sensual. Pero cuando vuelvo a la realidad me doy cuenta en la situación que estoy.
-¡Perdón, no sabia que estabas aquí!- me tapo los ojos evidentemente avergonzada.- Ya me voy- me volteo y trato de caminar a mi cuarto sin pensar en que casi lo veo desnudo, de seguro traigo la cara sonrojada.
-Eh, ¡Violet!- me toma del brazo y me voltea. Sigue igual, solo lleva una toalla.- No te preocupes, ya me iba yo- dice y me deja ahí, conmocionada por el momento.
Me meto rápido al baño y me recargo en la puerta, "soy una tonta, hubiera esperado para bañarme después". Me miro al espejo y, como pensaba, tengo la cara colorada como un tomate. Es el primer chico que veo sin camisa, me ha tomado por sorpresa, no pensé que iba a estar aquí. Hubiera esperado más después de tocar la puerta. De todos modos el no se veía nervioso ni avergonzado. Espero que después de este momento no estemos incomodos el uno con el otro, ya estaba enojada con el, y se porto de una manera extraña hoy.
Me meto a la regadera y dejo que el agua caiga por mi cuerpo, se siente tan bien, tan relajante.
Escucho unos golpecitos en la puerta. Mierda.
-¿Violet? ¿Puedo pasar? Me he olvidado algo en el baño, no te mirare lo ju...- lo interrumpo.
-¡No!- grito.- ¿Qué has olvidado?- saco la cabeza para ver si hay algo que le pertenezca a Sam, veo su celular.
-Mi celular, lo necesito, tengo que marcarle a mi mamá para preguntarle como esta.
-De acuerdo, pero si miras te juro que te matare- lo digo muy en serio, si mira le haré daño.
-Esta bien- suelta una carcajada.
Escucho que se abre la puerta y se cierra en cuestión de segundos, "menos mal".
-Sobre lo de ahorita...- dice y yo me sobresalto.
-¡Pensé que ya te habías ido, Sam!- es una situación muy vergonzosa pero por una extraña razón también me resulta emocionante.
-Quería aclarar las cosas, vi que te pusiste muy nerviosa, no importa de verdad, a mi no me importa. No le des más vueltas al asunto, tampoco fue tan malo que digamos- dice. Presiento que tiene una sonrisa.
-Entiendo- contesto, dudo lo que voy a decir a continuación pero la pregunta sale de mi boca.- ¿Por qué me dejaste plantada ayer?
No escucho nada y pienso que ya se ha ido, pero después de un rato contesta.
-No es el mejor lugar para hablar de eso- dice y sale del baño con un portazo.
"Vaya" parece que se enojo por mi pregunta y nuevamente presiento que paso algo que me quiere ocultar.
Esta conversación ha sido de lo más extraña, yo estaba desnuda debajo de la regadera y el estaba al otro lado de la cortina, nos separaban centímetros, y, después de esto compruebo que mis sentimientos han crecido más.
Me gusta más de lo que creía y eso me duele.
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No quiero enamorarme
Romance¿Alguna vez te has enamorado de tu mejor amigo? Dicen que cuando uno de los dos se enamora lo arruinan todo... Pero esta novela no es así. No se enamoro solo uno, se enamoraron los dos, ninguno qui...