El Hechizo Circular

Capítulo II

Caigo de mi cama con el pulso muy agitado.

Doy unas cuantas vueltas en el suelo y me pongo de pie como puedo, corro hacia el apagador y enciendo la luz; estoy en mi habitación y tuve una pesadilla. Menos mal, me relajo respirando profundamente, me recargo contra la pared y me deslizo poco a poco hasta estar sentada en el suelo. Siento un cosquilleo extraño en mi espalda.

—¿Qué hora es? —balbuceo inconsciente, aún está oscuro afuera.
—Son las cinco de la mañana, escuché un golpe, ¿estás bien? —mi hermano entra a la habitación y se sienta a mi lado.
—Una pesadilla. Nada grave.
—Estoy seguro de que a Enar le encantará saber sobre eso. Hablando de él, ¿viene a visitarte hoy?
—¡Es verdad! Lo había olvidado, teníamos pensado comer algo aquí y después ir al cine.
—Espero que se diviertan —Joseph me mira extrañado por unos segundos —. Oye tú nunca sueñas, es muy raro que de repente tengas una pesadilla, ¿no? ¿Qué soñaste?

Guardo silencio unos segundos.

—Algo raro, una chica de la escuela era una bruja y tenía de ayudante a otro chico muy guapo que nunca había visto. Tenían poderes raros y podían leer mi mente, luego la chica se enojó y nos mató a los dos, porque su ayudante trató de salvarme.

Joseph me mira tratando de aguantar la risa.

—Está claro que pasas mucho tiempo con tu novio, él siempre sueña que lo mata una bruja también ¿no? Él te está contagiando de algo, locura tal vez. —bromeando se pone de pie y me extiende sus manos para ayudarme a pararme.
—Diría que más bien estamos conectados, no como cierta persona soltera que conozco. —le muestro la lengua en señal de burla, a la vez que tomo de sus manos para levantarme.
—Estoy soltero porque quiero, solo te lo aclaro.

Joseph sale de mi habitación. Supongo que volverá a dormir. Yo también debería para no dormirme en mi cita de hoy. Apago la luz de mi cuarto y antes de acostarme reviso debajo de mi almohada buscando mi celular. Abro una de mis muchas redes sociales y comienzo a scrollear un rato, es una mala costumbre.

"Solo cinco minutos", me digo a mí misma mientras veo a unos lindos gatitos bebé maullar.

Al pasar al siguiente video veo el titular: "¿Qué está pasando con la luna?", generalmente ese tipo de contenido astrológico me aburre y lo salto, ya que es Joseph quien realmente mira eso, pero por algún motivo esta vez me detuve a verlo.

—Hace unas horas se detectó la presencia de una grieta en la luna, los científicos aún no saben la causa ni han dado una explicación, por lo que estamos ante la duda de las consecuencias que esto pueda llegar a tener.

Algo confundida me levanto de mi cama y me asomo por la ventana buscando la luna. A simple vista no se ve nada más que los mismos cráteres de siempre que forman un conejo. Otro video corto empezó a reproducirse donde alguien con un telescopio menciona que con el debido detenimiento puedes alcanzar a ver la grieta en la luna.

Curiosamente, todo este revuelo me parece familiar, aunque no he visto nada como esto antes, es como un déjà vu. Sin darle más vueltas por el momento me fui a dormir, ya que mis cinco minutos se habían terminado.

Me vuelvo una con las cobijas, mientras mi mente se oscurece poco a poco hasta quedarme dormida. A mediados de mi siesta, siento un calor rodeándome el cual me llena de tranquilidad.

Al pasar de unas horas me despierto otra vez, ahora más tranquila, sabiendo que estoy en el mundo real. Noto la presencia de un hombre muy hermoso a mi lado, abrazándome, completamente dormido.

Con una sonrisa de oreja a oreja, me acerco a besar sus labios, pero claro, el bello durmiente no va a despertarse con solo eso.

—Enar, despierta —mi novio no muestra la más pequeña reacción —. Tontito.