ME CONVERTÍ EN UN DI0S EN UN JU3GO DE T3RROR

Cap. 126-127 (Hogar de Bienestar del Amor)

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Capítulo 126

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En el momento en que Liu Huai entró a la iglesia, de repente se detuvo.

Mu Ke lo empujó ansiosamente: "¡Entra rápidamente al túnel!"

Liu Huai giró la cabeza y miró a Liu Jiayi, que estaba presionada contra el suelo. De repente, respiró hondo, sacudió las dagas que colgaban de su cintura e instantáneamente bajó su cuerpo y mordió la daga que cayó en el aire. Al mismo tiempo, dejó que la otra daga le atravesara el cuerpo. En el momento en que la daga atravesó su cuerpo, Liu Huai bajó la cabeza y dejó escapar un gruñido ahogado.

Mu Ke se sorprendió: "¡¿Qué estás haciendo, Liu Huai?!"

[Aviso del sistema: El jugador Liu Huai ha sido atacado por la daga de la oscuridad. Su valor mental eta disminuyendo... Debido a que el valor mental del jugador Liu Huai fluctúa violentamente, se está calculando la disminución del valor mental... El valor mental ha disminuido a 9. Se ha abierto el modo de ira. La fuerza física se está consumiendo violentamente...]

Liu Huai era como una golondrina voladora con el cuerpo bajado. Era tan rápido que sólo se podía ver su sombra. Barrió el suelo y voló hacia Miao Feichi.

En el momento en que los cuchillos dobles de Miao Feichi estaban a punto de cortar, Liu Huai emergió como un asesino saliendo de las sombras. Pisó el suelo, se dio la vuelta y usó la daga que tenía en la boca para enfrentar los cuchillos dobles de Miao Feichi que se dirigían hacia Liu Jiayi.

Miao Feichi miró en estado de shock a Liu Huai, quien sostenía la daga en su boca y resistía sus cuchillos dobles; esta era la primera vez que veía a un jugador asesino al que le habían cortado las manos resistirlo.

Los ojos de Liu Huai tenían una fuerza y un brillo tan desesperados que estremecían el corazón y el alma. Uno de sus ojos estaba medio cerrado debido al dolor y la comisura de su boca estaba agrietada por el impacto de los poderosos cuchillos de Miao Feichi. Su herida goteaba sangre, su rostro estaba tan blanco como un fantasma y su boca todavía babeaba.

Liu Huai se paró frente a Liu Jiayi sin retroceder y su pecho subía y bajaba violentamente.

"Mierda". Miao Feichi perdió el aliento por un momento. Sintió la determinación de Liu Huai, el loco que no quería morir, pero Miao Feichi todavía apretó los dientes y deslizó sus cuchillos viciosamente, "¡Todas las personas traídas por Bai Liu están locas! ¡Padre! ¡Te daré a Liu Jiayi!"

[Advertencia del sistema: ¡La salud del jugador Liu Huai ha disminuido 1 punto! ¡Por favor, huya rápidamente a un lugar seguro!]

Liu Huai se arrodilló en el suelo, se tambaleó y se levantó de nuevo, mordiendo una daga y mirando directamente a Miao Feichi; el significado de esa mirada era muy obvio: 'Todavía quiero pelear contigo, no me caeré fácilmente'.

El sudor goteaba por la mandíbula de Miao Feichi. Levantó la mano y se la secó antes de apretar los dientes. "¡¿Con qué diablos te llenó la cabeza Bai Liu?! ¡¿Vale la pena hacer esto por él?!"

Liu Huai miró indistintamente a Liu Jiayi, que tenía niebla negra envolviendo su cuerpo y que había sido arrojado por Miao Feichi para que Miao Gaojiang la manejara.

Si no tuviera una daga en la boca en este momento, Liu Huai podría haberle dicho a Miao Feichi que Bai Liu no lo había llenado con nada y que sólo habían hecho un trato.