ME CONVERTÍ EN UN DI0S EN UN JU3GO DE T3RROR

Cap. 95-96 (Hogar de Bienestar del Amor)

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Capítulo 95

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Por la noche, en el Hogar de Bienestar Infantil.

Bai Liu estaba acostado en la cama cuando de repente abrió los ojos en silencio. Escuchó el sonido intermitente de una flauta que fue suficiente para despertarlo, pero todos los demás en su habitación seguían durmiendo. Correr toda la noche había agotado a estos niños. Excepto por el pequeño Bai 6, que siempre estaba alerta, los otros niños dormían profundamente.

El pequeño Bai 6 se levantó de la cama con mucha suavidad, se puso los zapatos y miró el reloj que colgaba de la pared: eran las 2 am.

A altas horas de la noche, en el dormitorio colectivo solo se escuchaban los leves ronquidos de estos niños, que estaban acurrucados en las pequeñas camas, cubriendo sus blandos cuerpos con los edredones, incluso el pequeño Mu Ke se cubrió la cabeza con el edredón como para protegerse.

Pero en realidad, si alguien quisiera, podría quebrar fácilmente a estos niños. Bai 6 observó cómo la puerta de su habitación se abría lentamente. La puerta de madera crujió al ritmo de la flauta, revelando el pasillo oscuro, inquietante y vacío del exterior.

No había nadie al otro lado de la puerta, ésta se abrió sola.

El sonido de la flauta empezó a volverse continuo, melodioso y alegre y los niños que dormían en la cama empezaron a fruncir el ceño y a retorcerse inquietos, como si hubieran entrado en algún sueño mágico. Comenzaron a murmurar y a mover sus manos y pies.

Al ver esto, Bai 6 sacudió directamente a Mu Ke para despertarlo.

No era de extrañar que no le afectara el sonido de esta flauta. El sonido de la flauta solo funcionaba con niños dormidos, pero Bai 6 solo había estado en este hogar de bienestar infantil por dos días y dormía muy ligeramente en lugares extraños y desconocidos. En el momento en que sonó la flauta, Bai 6 se despertó, por eso no se vio afectado por el sonido hipnótico de la flauta.

El pequeño Mu Ke se despertó gradualmente por los empujones de Bai 6. Se frotó los ojos, pero su frente estaba cubierta de sudor frío, y respiró profundamente aturdido. Después de despertarse miró a Bai 6 de pie en la cabecera de su cama un poco en trance. Parecía no haber reaccionado al hecho de que ya se había despertado, o al hecho de que había una persona de pie en la cabecera de su cama.

El pequeño Mu Ke entrecerró los ojos y, somnoliento, estiró los pies fuera de la cama, se puso los zapatos y camino por el pasillo, diciendo dulcemente mientras lo hacía: "Tenemos que salir de este orfanato. Este orfanato nos sacará la sangre y nos matará..."

"Despierta, sólo estás soñando bajo la hipnosis de la flauta..." Bai 6 tiró de la muñeca del pequeño Mu Ke, que estaba a punto de salir por la puerta y le dio la vuelta para que se enfrentaran, entonces entrecerró los ojos.

Los ojos del pequeño Mu Ke estaban despiertos y todavía estaba temblando. Aunque su rostro tenía marcas rojas y parecía somnoliento, sus ojos estaban muy claros, pero todavía estaban inundados con una capa de lágrimas a causa del miedo.

"No fue un sueño..." El pequeño Mu Ke habló temblando, ese sueño obviamente lo había asustado, "Vi a muchas enfermeras atarnos a una cama, luego nos clavaron muchas jeringas en el dorso de las manos y los pies... y entonces la sangre roja se derramó a lo largo del tubo de infusión y goteó en un tanque de acero inoxidable. Más tarde, ya no se pudo obtener más sangre de nosotros..."