Melody.

Catorce ───

Cada persona tiene su manera de ver el mundo es como la metáfora del vaso, lo ves medio vacío o medio lleno no hay de dos en lo personal siempre creí ser de las que lo veían medio lleno, optimista mágico principalmente.
Pero hay aveces en qué el vaso está derramado en el piso, roto y con el agua regada por todo el lugar, ahora el agua no era agua era sangre, sangre que se derrama y tú no puedes hacer nada para que eso pare.

Melody había sido tomada del brazo por Pighim y arreglada al suelo tierroso.

─── Te dije que te dieras prisa ───.

Melody estaba escéptica ante los echos, ¿Había sido adoptada?. Eso era una buena noticia creía que ya nadie lo haría.

─── Tan solo debo recoger algunas de mis cosas ───.

─── A donde vas no necesitas nada de eso querida ─── entonces todo se volvió oscuro, un profundo dolor de cabeza, un mareo y oscuridad por todos lados.

El sonido de unas gotas cayendo haciendo eco, una, dos, una tras otra.

La chica trato de ponerse de pie pero un dolor en sus piernas lo impidió, tocó su rodilla, no había alguna herida pero al tocarla dolía horrible tal vez eran moretones.

─── Despertaste ─── una voz se escuchó en el lugar haciendo que la chica mirara hacia el frente, no se había percatado pero las palmas de sus manos tenían, tenía vendas por todo su cuerpo.

─── ¿Dónde estoy?, ¿Quién eres? ─── con esa contusión en la cabeza le era difícil articular palabras y entender su alrededor.

─── Creo que tendrás que averiguarlo ─── en la oscuridad se pudo ver una lámpara encender, la joven cerró sus ojos cegada por la repentina luz, al abrir los ojos se topo a un hombre extraño, con un ojo herido en que lo tenía algo cerrado.

─── N-no entiendo ───.

─── No es necesario que entiendas, que hables, nada solo quédate quieta como muñequita ¿Si? ───.

En aquel lugar extraño sucio y húmedo estaba Melody, mareada lastimada y maltratada. Encerrada con aquel hombre asqueroso.

Al despertar de nuevo pudo sentir un ardor en su cuerpo era incómodo.

La joven ahora pudo ver mejor, ya no se sentía tan mareada y se pudo poner de pie observando todo a su alrededor.

Las niñas suelen guardar sus muñequitas en un baúl de madera, las resguardan con cuidado en él, pero tal vez ese baúl no sea tan cómodo para ella que tal si se olvidan de ellas en el sótano, qué pasa cuando se humedece la madera, se llena de gusanos babosos, arañas, hormigas. ¿La muñeca termina rota no?.

Los fragmentos de porcelana se escucharon conforme iban cayendo, se rompió todo.

Melody solo tenía consigo, una vestido blanco ligero, sus pies descalzos, un listón enmedio de su cabello revuelto o desastroso, banditas en las piernas y una venda en su muñeca izquierda. A su lado una mesa de madera casi pudriéndose y encima de ella una caja música blanca redonda  algo pequeña, a un lado un juego de té de porcelana que aquel hombre le llevo, ¿Por qué?.

Eran preciosas pero ¿por qué Melody las rompió?.

Se sentía incómodo el ambiente húmedo del lugar, pero escuchar y sentir el aire de alguna forma la hacia sentir que seguía viva y libre.

─── Hey tú, ¿Tú también haz escuchado la voz? ─── dijo aquel hombre mirando a Melody la cual con sus enormes ojos lo observo confundida, ella no hablo con nadie de la vocesilla del bosque ─── Jaja, te estás volviendo loca, ¿Como sabes que soy real? ───.

─── Creo que las cosas horribles suelen ser más reales que las lindas ───.

─── ¿Eres irreal Melody? ───.

─── Tal vez, dependiendo de quién lo piense tal vez por eso hay muchas cosas reales y las que no, porque hay muchas mentes distorsionadas ───.

─── Mírate, te ves horrible ───.

─── Entonces soy real ───.

─── Aquella voz es solo tu imaginación, tal vez no estoy es real y ya estás loca, estás loca Melody estás desquiciada ───.

La jovencilla ni parpadeo, estaba sentada con las piernas estiradas y los brazos caídos a cada lado y su cabeza algo de lado mirando al hombre fijamente, esa acción de mirarlo comenzo a ponerlo nervioso.

─── Te sacaré los ojos ───.

Melody sonrió tenuemente.

─── Tal vez la loca no sea yo, y tal vez seas tú ───.

...