Capítulo final, cortito, pero espero les guste.
Después de aquella tarde, Edward prefirió enfrentarse solo a su familia, por lo que Jacob no pudo hacer más que dar un breve saludo a todos antes de retirarse a casa. Su padre también estaba inquieto, parecía haber notado algo al ver a su hijo con ropa diferente y mejillas sonrojadas, pero decidió no preguntar, esperando a que Jacob fuera quien le contara la verdad.
Jacob agradeció eso, pues, aunque ambos se habían confesado, no estaba seguro del estado actual de su relación con Edward y sentía que debía hablar con él al respecto. Sin embargo, esa conversación no se dio hasta una semana después.
Ese sábado, Jacob estaba en casa de los Swan con su padre para visitar a Bella y ver cómo se encontraba. Jacob acompañó a Bella a su habitación, algo que pareció agradar a Charlie, aunque Jacob pensaba que era una idea errónea.
—Supongo que Edward te lo ha dicho todo —comentó Bella mientras dejaba reposar su pie derecho en el sillón frente a ella. Aunque se sentía mejor, aún necesitaba descansar, por lo que solo había asistido a clases el día anterior.
—Sí, así es —Jacob trató de evitar mirar a su amiga, pues cada vez que recordaba esa tarde, se ponía nervioso y sus mejillas se volvían carmesí.
—Bueno, por tu expresión facial es innegable que algo ha sucedido. Edward también estuvo así ayer, se puso muy nervioso cuando le pregunté, y es extraño, porque parecía que su humor era inalterable, pero tal parece no es así.
Jacob no respondió y continuó observando los libros de la joven antes de percatarse finalmente del vestido azul que estaba colgado en el perchero junto a su cómoda, lo que finalmente le hizo comprender qué día era hoy.
—Hoy es el baile de fin de curso —afirmó Jacob más que preguntar, y Bella no pudo hacer más que asentir—. ¿Irás? ¿No dijiste que no lo harías?
—Y no iré —confirmó las sospechas de su amigo—. Este vestido fue un regalo, pero aun así no pienso usarlo hoy.
—Entiendo si eso es lo que has decidido.
—Es lo mejor.
Jacob frunció el ceño sin entender, pero Bella le sonrió cambiando de tema y preguntándole sobre lo que sabía de los Cullen. Jacob entonces comenzó a relatar algunas cosas que Bella también confirmó, y se sorprendió al saber que Jacob ya conocía el secreto de Edward.
—Bueno, es sorprendente, aunque en el fondo también creía que ya lo suponías. Llevas conociéndolo más tiempo que yo, era claro que te darías cuenta tarde o temprano.
—Uhm, eso también se lo dije a Edward.
—Lo más extraño es que no lo haya descubierto al leer tu mente.
—Ah, eso.
Jacob entonces le explicó a Bella sobre la promesa que Edward se había hecho a sí mismo, comprometiéndose a no volver a leer su mente ni la de Seth a menos que fuera extremadamente necesario. Bella no pudo estar más feliz por ambos; sin duda, se veía que se entendían bien y había una gran confianza entre ellos. Aquello solo hizo que no pudiera contener su emoción por lo que ocurriría, pero trató de tranquilizarse hasta que su amigo se fue esa mañana. Tomó su teléfono para llamar a Edward, quien respondió unos segundos después.
—Al parecer, no sospecha nada —reveló la joven, y Edward solo podía sonreír encantado al teléfono mientras observaba a sus hermanos ir de un lado a otro.
—Eso espero, aunque Jacob es impredecible —y Bella apoyó su punto.
—Buena suerte, Edward —su amigo le agradeció una vez más antes de colgar.
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Luz de las estrellas (Edward y Jacob)
ספרות חובביםCuando Edward salva a Jacob y Seth en el bosque, se forja una amistad desafiante que desentraña prejuicios y secretos. Jacob, sin conocer la naturaleza de Edward, se ve envuelto en una confusión de emociones mientras teme perder su amistad, especial...