CLOSER

🔥23🔥

Después de un par de horas, al fin lo habían dejado entrar a la habitación de Soojin.

A paso rápido se dirigió a la habitación que le habían indicado. Girando la perilla, lo primero que vió al entrar fué a su esposa dormida, con una sonda conectada a su brazo. El verla en esa cama en ese estado, lo había hecho sentir impotente.

Cerrando la puerta detrás de él, habían quedado a solas. Caminó despacio, tratando de que el zapato no hiciera mucho ruido. Una vez quedó frente a ella, se sentó con cuidado en el borde de la camilla.

Ahí acarició su cabello sin dejar de observar su abdomen. La bata que tenía puesta, estaba un poco manchada de sangre debido a las gasas que tenía en la herida.

Se acercó a Soojin, dónde depositó un tierno beso en sus labios. No le gustaba verla así. Incluso en su momento de odio hacía ella, sabía que habría estado a su cuidado en todo momento. A pesar de su dolor, no dejaba de ser la mujer que amaba.

No pasó mucho tiempo cuando Soojin poco a poco comenzó a despertar. Siwon se quedó muy al pendiente de sus reacciones y gestos. Una vez abrió sus ojos, se encontró con su esposo que no dejaba de mirarla.

— Hola Siwonnie ... — dijo con voz muy cansada. Quiso llevar su mano a la mejilla de su esposo pero por lo débil que estaba, ésta cayó sobre la cama. Siwon apretó esa mano y la llevó a su boca dónde dió muchos besos en ella.

— Hola princesa... — susurró de la manera más dulce que Soojin había escuchado. — No me he despegado del hospital. ¿Qué fué lo que ocurrió?. — ella cerró sus ojos unos segundos y después los abrió, mirando al techo blanco.

— No lo sé Siwon. — giró su rostro hacia él. — Había pedido permiso de salir temprano para ir a tú trabajo y cuándo estaba por subir al carro... Sentí un dolor horrible aquí. — con su mano entubada se señaló el costado. — Ahí fué cuando ví a una persona de negro.... Quise gritar a lo que me tapó la boca y luego sentí un dolor aún más fuerte en mi abdomen... — conforme había estado contando el relato, sus lágrimas escapaban de sus ojitos. —... Tuve mucho miedo Siwon... Quise llamarte pero... Volví a sentir otro dolor y después caí al piso... Ya no supe a dónde se fué... Siwon... —

— Estoy aquí princesa.... Aquí estoy... — también con lágrimas en su rostro, acercó su frente a la de ella dónde ambos se tocaron. Bajó su mano hasta su abdomen sin lastimarla. — Te juro que voy a encontrar al maldito que te hirió... No va a quedarse así... —

— No quiero que te pase nada... — negó con su rostro asustado. — No quiero verte en un hospital herido... Nunca... — Soojin se quebró. Con ambos brazos, abrazó muy fuerte a Siwon dónde su llanto era desgarrador.

Siwon por más que quiso hacerse el fuerte, también lloró junto con ella. Estaba agradecido con Dios de que su esposa estuviera bien pero también quería hacer justicia por lo que le habían hecho.

Poco tiempo después de que se tranquilizaron, Siwon se separó de ella, viendo su rostro húmedo. Con sus dedos limpió todo rastro de lágrimas.

— ¿Cómo te sientes ahorita?. Debería ir por el médico y te revise... — Ella negó poniendo sus manos en las mejillas de Siwon.

— Quédate aquí conmigo Siwonnie... No me dejes por favor... —

— Está bien princesa .... Aquí estaré.... — antes de separarse de Soojin, Siwon plantó un dulce beso en los labios de su esposa. Había Sido un beso tierno. Un beso dónde le transmitió paz y confianza.

Siwon se acomodó mejor en la camilla, dónde se sentó en la orilla. Soojin quiso recargarse.en su pecho pero al momento de querer moverse, sintió un dolor en su abdomen que la hizo quejarse, a lo que su esposo se preocupó.