Capítulo #19

349 46 0
                                    

3 años después

Abigail: Papii (La pequeña corrio hacía donde Will se encontraba para abrazarlo)

Will: ¿Cómo estás cariño?

Abigail: Biem... Moy vino a vete

Will: ¿Ah si?¿Te dijo por qué?

Abigail: Ño

Will había conocido a Molly hacía 2 años, mientras arreglaba el motor de su bote. La alfa claramente se había interesado en él. Aunque el evitaba el tema de conversación. Pero ella parecía bastante persistente.
En el corazón de Will simplemente estaban Abigail, sus perros... Y Hannibal...
Desde que lo habían encerrado no le habían permitido verlo. Y menos a Abigail, aunque Will de cualquier manera le hablaba a la niña sobre su padre.
También le habían obligado a retomar terapia, Will estaba molesto. Estaban haciendo lo que querían con él. Y ni siquiera le dejaban pedir nada a cambio, ya que ya sabían lo que él iba a pedir.

Will se despidio de la niñera y le dio de comer a los perros, siendo ayudado por la pequeña.

Abigail: Papii ¿Cuano vene papá?

Esa pregunta se había vuelto más habitual de lo que esperaba, y a Will le rompía el corazón no saber que responder y tener que mentirle. También era su culpa por hablarle de Hannibal, pero tampoco quería que la niñera no supiera quien era su padre.

Will: Falta poco Abi... Ya lo vamos a ver...

Alana entraba al cuarto donde tenían encerrado a Hannibal, siendo lo único que lo separaba del resto, un vidrio.

Hannibal: Dra.Bloom (Dijo desde el sillón) ¿A qué debo su visita?

Alana: Jack quiere hablar contigo.

Hannibal: ¿Cómo está Margot?

Alana: No es de tu incumbencia

Hannibal: Mandale saludos, y al pequeño también

Alana: Si por mi fuera ya estarías muerto.

Hannibal: Siempre tan encantadora.

Jack: Hay un muerto.

Hannibal: Claramente no fui yo

Jack: Pero puedes indicarnos quien fue.

Hannibal: ¿Pero quiero?

Jack: Puedo hacer que todas tus comodidades sean removidas

Hannibal: ¿Ah si?

Jack: La Dra.Bloom ya no te tiene demasiada estima.

Hannibal: Yo tampoco, no te preocupes Jack ¿Porqué debería ayudarte?

Jack: Permitire que veas a Will. Una vez.

Hannibal: ¿Le harías eso a Will?

Jack: Ayúdame a encontrar al hada de los dientes.

Hannibal: ¿Con ese nombre no lo han encontrado?

Will: ¿Tanto años y aún no quitas ese asqueroso perfume?

Bedelia: ¿Si te molesta porqué sigues viniendo?

Will: Estoy obligado.

Bedelia: ¿Jack te tiene obligado a venir a terapia?

Will: Eso ya lo sabes.

Bedelia: ¿Cómo vas con las pastillas?

Will: Bien, no he tenido ningún celo...

Bedelia: ¿Y el bebé?

Will: Abi ya no es una bebé...

Bedelia: Ya sabes de lo que hablo

Will: Creo que recuerdas bien lo que sucedio... ¿Qué ganas con preguntarmelo de nuevo?

Bedelia: Quiero saber como llevas la perdida

Will: Ni siquiera pude decir nada ¿Cómo piensas que me siento? (Dijo posando su mano sobre su barriga)

Bedelia: ¿Y la mordida? Ya no siento el olor de Hannibal

Will: Las pastillas... Ya casi no siento nada cuando paso la mano por ahí...

Bedelia: Si le sucede algo, ya no te sucedera nada... Ni siquiera tu pudiste salvarlo, era cuestión de tiempo

Will se fue junto con Abigail, que se había quedado con una tablet que Bedelia le había prestado para que se entretuviera.

Will: ¿Jack?¿Qué quieres?

Jack: Necesito tu ayuda para atrapar al Hada de los dientes

Will: No... No voy a volver a eso

Jack: Porfavor Will, nadie tiene tus capacidades

Will: Jack... No

Jack: Hablamos con Lecter y se rehúsa a ayudar

Will: ¿Para qué lo necesitas?

Jack: Parece que este nuevo asesino es fan suyo

Will: Sería la carnada perfecta...

Jack: Pero no hablara conmigo

Will: Dile a alguien más que lo haga

Jack: Es lo que estoy haciendo

El omega se encontraba sentado en la ahora oficina de Alana, ansioso. Iba a ver a Hannibal después de varios años.
¿Seguiría siendo lo mismo? Esperaba que Abigail pudiera entrar con él, pero le habían negado la entrada a la habitación donde se encontraba Hannibal.

Will: ¿No hay problema de que se quede contigo?

Alana: Para nada, parece una niña muy dulce

Will: Es... Algo tímida

Alana: Muchos niños suelen ser así, no te preocupes

Will: ¿Cómo esta Margot?

Alana: En casa, cuidando al bebé...

Will: Lo siento que no pude ir...

Alana: ¿A la boda? Entiendo, no te preocupes (La omega dirigio su atención a la niña) Abigail ¿Cierto?

Abigail: Si...

Alana: Soy Alana ¿Qué te gusta hacer?

Abigail: Dibujar

Alana: Esta bien, si quieres mientras esperamos a que tu papá vuelva dibujamos ¿Si? (La niña asintió)

Abigail: Papi ¿Vas a ve a papá?

Will: Si Abi...

Abigail: ¿Puedo ir?

Will: Tu papá tiene una sorpresa... Y me dijo que tienes que esperar un poquito para verla

Abigail: ¿Egalo? (Will asintió)

Luego de esto el omega fue escoltado hasta la habitación donde se encontraba Hannibal, pasando por un pasillo que parecía eterno, como si nunca fuese a llegar.

MentiraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora