Diego Martínez vive encerrado en una burbuja, un método de autodefensa para no tener que revivir sus traumas, mientras tanto Alex Perez, acaba de volver del centro de menores dispuesto a ganarse su perdón por un detalle que ocurrió el año pasado, ¿S...
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ALEX
Esa tarde utilize atajos que ni sabia que existían para llegar a la plaza. Me daba pánico que Pedro y Chema me viesen colocar el tinglado lgtb con Diego, y también me daba pánico que Diego se diese cuenta y se sintiese ofendido. Ya no podía cagarla mas con él, estaba decidido a forjar una amistad con ese pálido sujeto.
Cuándo llegué a la plaza lo vi subido a una mini escalera colgando unas pancartas de la bandera gay.
-Me sorprende que me haya hayas dado otra oportunidad. -Le dije, acercándome por detrás.
Diego llevaba una camisa de rayas con muchos colores y unos vaqueros acampanados. Ese tipo de camisetas le quedaban la hostia de bien, cómo cuándo lo vi en la tienda al volver del centro de menores, que mostró su abdomen solo con alzar un brazo.
Él giró la cabeza -Dale las gracias a Andrea. -Bajó de la pequeña escalera- Si fuese por mí estaría escribiendo tu nombre en la Death Note -Se acercó a mí.
Sea lo que sea eso, suena fatal-Respondí y alcé mi mano mi mano hacia su cuello. Él la paró, sorprendido.
-Uno, que poca cultura tienes...Dos, ¿Cuál es tu obsesión con meterme mano? -Preguntó.
Levanté mis brazos en inocencia -Tranqui. Es para ver si te lo habías quitado -Saqué el colgante- ¿Cómo es que no me lo tiraste a la cara el otro día?
Sacudió sus hombros -Yo que sé Alex... -Respondió cortante.
-¿Este es Alex? -Me di la vuelta y vi a una mujer pelirroja sonriéndome.
-Hola tía -Respondió Diego detrás mía. -Sí, este es.
Esa definitivamente no era la mujer que me había imaginado al pensar en el nombre "Erminda". Me entró una vergüenza to' grande porque fue ella la que llevó la denuncia y seguro que le caía fatal.
-Muy bien. Siempre hay espacio para aliados, sobretodo tan generosos -Me guiñó un ojo con una gran sonrisa en la cara- Te dejo en buenas manos Alex. No creo que tardéis mucho en colocarlo todo. -Miró a Diego- Cualquier cosa me das un toque.
Erminda se despidió y un rato después me encontraba colocando una bandera de unos colores guapos, tuve que subir yo a la escalera alta porque Diego tenía cara de acojonado.
-¿De que son estos colores? -Miré abajo por un segundo. Diego estaba sujetando la escalera y tenía cara de circunstancia.
-¡No mires abajo Alex! Céntrate. Son los de la bandera bisexual.
-¿Bisexual? ¿Y que es eso? -Dije pegando una de las esquinas del poster.
