En el mar de rostros desconocidos,
hay un viento que me empuja a huir,
una marea que me arrastra lejos
de las voces invasivas, de las miradas intrusas.Las palabras no deseadas caen como gotas de lluvia
sobre el paraguas de mi indiferencia,
resbalando lejos, sin tocar la piel de mi alma,
sin perturbar el santuario de mi espacio personal.No me hablen, extraños con preguntas impertinentes,
con sus diálogos forzados como cadenas invisibles
que buscan atrapar mi ser en la trampa de la cortesía,
en la red de la convención social que dicta falsa familiaridad.Mi instinto grita, un clamor silencioso que solo yo escucho,
pidiendo distancia, pidiendo calma,
un refugio en la muchedumbre, una isla de soledad
en el océano tumultuoso de la interacción forzada.La intrusión de un desconocido es un ave que sobrevuela,
amenazante, sobre el nido de mi tranquilidad,
y yo, como ciervo alerta en el bosque,
estoy siempre listo para huir, para buscar la seguridad
en la espesura de mi propio mundo.No me malinterpreten, no es miedo lo que siento,
sino una elección deliberada, un deseo de preservar
la pureza de mi jardín interno,
donde solo entran aquellos que yo elijo invitar.Este poema es mi escudo y mi declaración,
la afirmación de mi derecho a estar solo,
a no ser abordado si no lo deseo,
a no ser anclado por la expectativa de la interacción.Déjenme ser, déjenme respirar,
en la vastedad de mi propio espacio,
y yo les prometo que el silencio entre nosotros
será más elocuente que cualquier conversación forzada.
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ᴀʟᴍᴀ ᴇɴ ᴇʟ ᴠᴀᴄíᴏ
PoesíaLa colección de poesía titulada "Alma en el vacío " es un viaje melancólico y reflexivo a través de los rincones más sombríos y a la vez esperanzadores del espíritu humano. Cada poema es una veta en la mina de las emociones, explorando la soledad, l...