33

2.1K 218 35
                                    

Lo que fueron horas, se convirtió en días y finalmente terminaron siendo casi dos meses desde que Sunoo se había ido.

Pero no todo era malo.

Quizás...

Porque ciertos amantes no habían dejado de hablarse, llamarse y extrañarse en ningún momento.

O al menos eso querían pensar, cada vez que hablaban por videollamada ambos solían sonreírse y conversar como si nada, hablando sobre sus días, sobre lo que querían, pero nunca sobre "su relación".

Sunoo había mejorado en cuanto la depresión que había empezado a tener, ahora comía normalmente y no lloraba constantemente.

Aveces la extrañaba, aveces quisiera estar con ella y oír su voz.

Pero finalmente entendió que ella necesitaba espacio y tiempo, el debía ser comprensivo y sobre todo esperar por ella aún que cierta espera parecía bastante larga.

—Entonces el Gimnasio será remodelado a fin de mes, lo expandiré, por algún motivo hay muchos más clientes y a veces el espacio colapsa—Sunghoon hablaba a través de la pantalla.

—Eso está genial, cada vez es mejor ¿No crees?—una sonrisa nostálgica salió de Sunghoon.

—Si...¿Que hay de ti? ¿No bailaras?

—Bueno eh estado buscando una academia aquí, quizás...

—Oh... Entonces planeas quedarte mucho más tiempo— aquello había sido un murmuro, pero Sunoo lo había escuchado claramente.

Y nuevamente esa barrera entre ellos volvía a aparecer, como si no pudieran estar tranquilos y juntos del todo, siempre había algo que los alejaba un poco más.

Y Sunoo tenia miedo.

Había notado extraño a Sunghoon , ya no le decía apodos cariñosos y se notaba tenso cuando hablaban, no quería pensar demás, ni hacerlo sentir incómodo hablando del tema, pero justo ahora le preocupaba a dónde llegarían con todo esto...

—Bueno yo..

—¡Sunghoonie una máquina está causando problemas ¿Podrías ayudarme? No puedo continuar mi rutina—una voz para nada conocida y bastante chillona se escuchó al otro lado de la pantalla, para Sunoo todo se congelo mientras Sunghoon parecía inmutarse.

—Si Lía ya iré.

—¡Gracias cariño!

La sonrisa que Sunghoon puso después de aquellas palabras no pasó desapercibida por Sunoo, decir que no estaba ardiendo en celos sería una completa mentira.

"¿Sunghoonie?"

"¿Cariño?"

¿Quien mierda se creía? Además se supone que Sunghoon estaba en su oficina, ni siquiera tocó la puerta solo entro chillando, y si...

—Sunoo debo...

—Ya escuché, adiós.

Ni siquiera escucho nada del otro lado cuando colgó la llamada sintiendo una fuerte presión en el pecho, es que ¿Que más podría ser? Si se lo hizo a su madre ¿Por qué a él no? Era un completo estúpido.

Todo el tiempo pensando en el, en si estaba bien, extrañandolo y soñando cada día con estar en sus brazos y el...

Nisiquiera sabía que coño hacia el, si bien le contaba de sus días en ninguno de ellos incluia a una mujer.

Dejo el teléfono en la cama y miro la laptop en su peinadora, ahora no tenía nada mejor que hacer, quizás debería distraerse un poco, jugar algún juego o...

Editar algún video....

Mientras Sunghoon estaba demasiado confundido con la actitud de Sunoo, parecía bastante molesto pero no le dijo absolutamente nada.

Y es que las cosas se habían tornado un poco inseguras y distante para ambos.

Querían creer que era por la situación en la que se habían alejado.

Pero había algo más.

Culpa...

Porque Sunghoon no podía dejar de sentir culpa, no podía evitar sentirse mal al pensar que Sunoo tenía que estar en una ciudad diferente tratando de organizar su vida y dándose tiempo para mejorar cuando debería estar aquí, en la academia, bailando, con su madre y siendo completamente feliz.

Si tan solo el no se hubiera metido en su vida todo sería completamente diferente.

Pensó que con el tiempo la sensación en su pecho mejoraría pero todo fue peor cuando hace una semana cuando decidió salir con Ni-ki, Eunwoo y Jay a beber unos tragos para despejar su mente y la vio.

No parecía la misma mujer, estaba sola en la barra bebiendo trago tras trago, no sonreía y no dejaba de mirar su fondo de pantalla.

Una foto de Sunoo.

Eso fue un duro golpe para el, al darse cuenta que no solo había dañado a Sunoo si no que a ella también.

Recuerda que esa noche la vio ponerse tan ebria que el mismo la llevo a su casa, ambos sin decir nada aún que el quisiera pedirle perdón y ella lo mirara con los ojos cristalizados, sabía que no era el momento.

Cuando la dejo en su casa segura y se dio la vuelta para irse la escucho decir.

"Aún que mi corazón los haya perdonado mi mente no olvida, no le hagas lo mismo a el."

Volviendo a la actualidad y saliendo de sus pensamientos, Sunghoon se levantó dispuesto a ir a revisar dicha máquina, dejando su teléfono en el escritorio.

Si algo tenía seguro es que el nunca podría engañar a Sunoo, el nunca podría engañar a la persona de la que estaba tan enamorado, lo extrañaba con todo su ser, deseaba verlo, tocarlo, consentirlo pero sabía que el tiempo era algo necesario y el no podía dejar de pensar en el como la causa principal de todo el problema.

Pensó en dejarlo.

Pensó en terminar todo.

Pero ¿Cómo tomas una decisión que sabes que va destruirte? Ya lo hizo una vez cuando le pidió a su padre que se lo llevará, y hasta ahora todo había ido en picada para el.

Aún así veía a Sunoo mejor y eso debería ser suficiente para el.

Tratando de enfrascarse en lo que tenía que hacer, Sunghoon empezó a revisar dicha máquina, encontrado que no tenía ninguna falla solo un pequeño inconveniente.

La mujer al ver que Sunghoon había resuelto todo salto de felicidad a sus brazos gritando con emoción.

Aún que para el su voz fuese irritante, no dudo en sonreirle y desearle que tuviera un buen día antes de irse nuevamente a su oficina y hundirse en el manojo de pensamientos.

Los mismo que se vieron interrumpidos por aquella notificación.

"Sunshine a subido un nuevo video."

Sus ojos se abrieron con sorpresa y sin dudarlo abrió el vídeo llevándose la más grande sorpresa de todas al leer aquel título.

"My man fucks me."

Sunoo quería volverlo loco, si seguramente eso quería hacer.

Only Fans || Sungsun [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora