capitulo 16

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-haber platícame, siempre la mencionas y nunca me has dicho quien es -dijo la madre de cesar mientras estaban sentados en la mesa con una de sus tías

-es tu nuera, es mas que claro -dijo la tía de cesar

-no es mi novia -dijo cesar

-entonces por que estas tan nervioso -dijo su tía con el afán de molestarlo

-mama, mira a mi tía Lupe no para de molestarme -dijo cesar en modo de queja

-ella te esta preguntando por tu amiga, no esta haciendo otra cosa -dijo la madre de cesar

-esta bien -dijo cesar disgustado -es una amiga que conocí hace no mucho, es un año menor, aun va en segundo, la conocí por que esta aprendiendo a tocar la guitarra, así que practicamos juntos, me llevo muy bien con ella, vive hasta abajo, así que de vez en cuando la acompaño a casa, tiene una amiga, se llama isabela, también me llevo muy bien con ella, pero mari es mas divertida, además sabe dibujar, me esta enseñando lo básico, aun que gracias ella también he retomado mucha practica con la guitarra

-ya vez, eso todo lo que tenias que decir, dijo su tía

La tía de cesar había llegado de visita sin que el lo supiera, no fue hasta después de dejar a mari a su casa que llevo y logro ver a sus primos menores, Michelle, la mayor con apenas diez años seguida por Carlos, que apenas tenia ocho, ambos visitaban la casa muy seguidamente, sin embargo cesar no esperaba visitas esta vez, pensó que podrían venir en unas semanas pero parece todo lo contrario. Por su parte cesar le gustaba la visita de primos, al no tener hermanos, cesar se encantaba cada que ellos lo visitaban, a pesar de su personalidad, adoraba a sus primos, ya habían crecido lo suficiente para poder jugar con ellos, ya que los bebes no eran lo suyo, cesar no tenia paciencia una vez estos empezaban a llorar. Esta vez ya no tenia ese problema, ya que habían pasado la etapa de llorar fácilmente.

-cesarito -dijo Carlos -vamos a jugar

-está bien, que quieren jugar?

Carlos quería jugar futbol, mientras Michelle quería jugar algo mas tranquilo, cesar al cual ellos llamaban cesarito cumplió sus peticiones turnándose para juga con cada uno de ellos. Cesar pasaba una del as mejores tardes que había tenido en mucho tiempo. La tarde termino y ellos se quedaron dormidos debió al cansancio, regresaron a casa una vez su tío llego por ellos, tenia un auto rojo donde tuvieron que dejar a los niños aun dormidos sin tratar de despertarlos.

Cesar se levanto temprano como siempre, sus cosas nunca estaban en su mochila, así que se apresuro a ordenar todo, cuando llego a la escuela encontró a mari con su guitarra justo antes de entrar a la escuela.

-mari!! -grito cesar al verla

-buenos días cesar -dijo mari apenas cesar la alcanzo

-tan temprano ya estas con ella?, déjala en paz, ya parecen maridos -dijo isabela apareciendo atrás de ambos

-hola isa como estas -dijo mari al verla

-mal, ahora quieren llegar juntos, -dijo cuando cesar la interrumpió -ya, ya, ya, ella es libre, que tiene si vengo y me voy con ella

-si claro cesar, buenos días, como estas, algo, algo!, solo quieres pelear -dijo isabela molesta

Mari como siempre sabia que su juego no iba a parar hasta que se separaran así que hiso caso omiso a los reclamos de ambos para entrar mientras ellos se pelean.

-ya basta -dijo mari un pasillo antes de llegar a su salón -isa me das un segundo

-ya vez me prefiere a mi -dijo cesar rápidamente cuando mari le dio un jalón de orejas

-ya! Cesar ven conmigo -dijo mari apartándose unos pasos de isabela -cesar puedes quedarte el libro hoy tengo un idea pero necito dejar el diario

-claro como tu digas -dijo cesar al oír esto

Mari saco el diario de su mochila y se lo entrego a cesar, para después volver con isabela

-ese no era tu diario mari? -pregunto isabela

-así es isa pero últimamente se lo he prestado a cesar para dibujar, es que también guardo dibujos -dijo mari siendo lo primero que se le ocurrió

-esta bien pero ya vamos a entrar, y tu ya vete a tu salón, corre

Cesar regreso al salón donde con el diario en sus manos espero al primer momento libre que tenia para escribir en el, sin embargo, no fue hasta el descanso que logro tener tiempo

-oye sabes por qué mari te dejo conmigo? -escribió cesar en el diario

-no lo sé, tenía la esperanza de preguntarte lo mismo, te recuerdo no puedo ver nada que pase fuera de la escuela, incluso si el diario sale de ella

-donde esta mari ahora? -escribió al diario

-déjame buscarla -no tardo mucho cuando regreso -mari esta es en la sala audiovisual completamente sola, pero -dejo de escribir por un momento -también dejo la hoja de mi diario que siempre lleva consigo

-voy con ella -dijo cesar levantándose

-espera un momento creo que se que es lo que trata de hacer -escribió el diario

-mari esta tocando la guitarra

Mari había pedido la sala para ensayar con suequipo una presentación que van a tener, pero al llegar el descanso todos sefueron menos mari la cual tenia su guitarra, cesar fua a la sala audiovisual ensu búsqueda aunque no dejaba de ver el diario el cual esperaba encontrarse conque mari lograra conectar con la música. Algo poco planeado, mari pensó ensacar algo de su sentir tocando una canción en donde lo había hecho Javier, dondetantas veces se quedaba solo, encontrándose con aquel fenómeno, pero por masque toco mari nunca paso nada.

-mari dijo cesar después de esperar un momento y ver que no había ocurrido nada

Mari le conto a cesar que trataba de conectar con la música así como lo había hecho Javier en su momento, pero que por mas que tocaba nada había cambiado

-tranquila aun queda algo de tiempo, antes de que lleguen tus compañeros no te gustaría intentarlo una vez mas?

-no creo que funcione, creo que tal vez se debe a que el diario o tu están aquí, no lo se, que tal si tu tocas algo, yo aun tengo mucho errores

La intención de mari no era dejar de intentarlo, pero el tiempo para que alguien entrara era bastante corto, así que cesar tomo la guitarra y en menos de dos notas, tanto que aun no sabia que debía tocar, empezó a tocar de manera improvisada, un sonido que no era de sus dedos o la guitarra sonaba en toda la sala, cesar dejo de tocar pero las cosas no cambiaron, su alrededor bajo la luz, como si fuera de noche, ambos tomaron la mano del otro pensando que estaban en el salón de las sombras, y aunque no estaban equivocados, no estaban ahí exactamente.

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⏰ Última actualización: Jun 11 ⏰

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