AST - SWEET LOVE

CAPÍTULO 6

🍬💛 “La vida es como una caja de bombones, nunca sabes el que te va a tocar.” 💛🍬

YUJI POV

Mi corazón late descontrolado con la idea de que Satoru se quede a pasar la noche. No quiero que corra peligro solo por atenderme en un mal momento, y tampoco es como que algo más vaya a pasar, pero el tenerlo aquí ya es suficientemente abrumador, en el buen sentido.

Jamás había invitado a nadie a casa, y por fortuna o desgracia Satoru es el primero en conocer mi pequeño refugio. Me alegra que a pesar de ser un lugar sencillo se haya sentido acogido.

No puedo evitar sonreír antes mis pensamientos. – Espero que no le moleste dormir aquí. – saco un futón de mi armario para acomodarlo junto a mi cama.

La casa tiene más habitaciones, pero algunas de ellas albergan recuerdos de mi abuelo y padres que no estoy listo para enfrentar, todas las cosas de nuestra antigua casa en Sendai están amontonadas en esas habitaciones, así que es mejor que se quede aquí…

Conmigo.

Luego de acomodar el futón e ir por sabanas limpias, paso rápidamente por la sala y para mi sorpresa, Satoru ha limpiado y lavado todo lo que ensuciamos, ahora se encuentra en la cocina acomodando las cosas de forma tan natural que pareciera que ha vivido toda su vida aquí. Me quedo observando en silencio y un cálido sentimiento rebosante de felicidad me hace sonreír a medida que sigilosamente me voy acercando.

– Satoru – susurro ya estando a unos pasos – ¿Prefieres el agua tibia o fría? – sin darme cuenta he acortado la distancia más de lo debido. No solo son sus ojos los que hipnotizan, su mera existencia es deslumbrante y atractiva y poco a poco siento que me arrastra más hacia él.

– Considerando el clima, prefiero que sea tibia, por favor. – sonríe al darse la vuelta. – Por cierto, siento mucho mi atrevimiento, pero ya me encargué de limpiar y acomodar todo.  – limpia sus manos con un paño y suspira satisfecho.

– Siento que tuvieras que encargarte de eso, demoré demasiado en acomodar el futón. – niego con la cabeza y al levantar mi vista, Satoru está viendo hacia la sala como si buscara algo.

– ¿Necesitas ayuda para traer el futón a la sala? – en respuesta solo ladeo mi cabeza sin entender.

– ¿A la sala? No pretenderás que te deje dormir aquí con este clima, ¿o si? – frunzo el ceño - ¡Si te quedas aquí te vas a congelar! – cruzo mis brazos frente a mi pecho. Un tenue rubor decora las mejillas de Satoru, quien evidentemente apenado rasca su mejilla.

– No es necesario, puedo dormir en cualquier otro lado. Solo no quiero molestar, ya es muy egoísta de mi parte quedarme. – susurra aquello último y de nuevo mi corazón ha correspondido aquel divertido comentario.

Suelto un pesado suspiro y me acerco para pellizcar su mejilla. – No digas tonterías, no me incomodas y tampoco me molesta que te quedes ahí. – me mira sorprendido y se limita a asentir al comprender mi molestia. – Bien. Solo quería saber el agua que prefieres. – suelto su mejilla y acaricio la rojiza zona. – Sígueme para que sepas donde dormirás. – todo mi cuerpo tiembla, siento los latidos de mi corazón retumbar con fuerza contra mis tímpanos a medida que avanzo. Satoru viene detrás de mi sin decir nada.

– Esta parte de la casa contrasta mucho con la sala. – lo miro de reojo y atento recorre con su vista el oscuro pasillo. – Es más triste. – dice con cierto desconcierto en su voz.

No lo culpo. La sala parece un lugar de ensueño, lleno de colores y diversos aromas gracias a su unión con la cocina. Sin embargo, el ambiente del pasillo y las habitaciones es más sombrío y deprimente.